El líder de Ciudadanos, Albert Rivera, ha dicho que su partido no va a contribuir a que Mariano Rajoy siga siendo el presidente del Gobierno, reconociendo que sus votos no son decisivos, y ha avanzado que esta misma tarde hablará con el PP y PSOE para poner en marcha una mesa de negociación tripartita.
No ha querido decir claramente si se abstendrá o no en el caso de que Rajoy se presente a la investidura y se ha limitado a asegurar que los 32 escaños de Ciudadanos «no son necesarios» para poner en marcha el Ejecutivo y, en cambio, si lo son los socialistas.
Con un análisis más reposado de los resultados de las elecciones de este domingo, en las que Ciudadanos perdió ocho escaños, Rivera, en una rueda de prensa en la sede de Alcalá, ha admitido que si PP y PSOE logran ponerse ahora de acuerdo, Ciudadanos «no tiene nada que decir» y estará en la oposición defendiendo sus reformas.
Rivera, tras reunirse con su ejecutiva, que le ha dado el mandato para promover esa mesa tripartita, según ha explicado, ha asegurado que esta tarde se pondrá ya en contacto con los otros dos partidos «constitucionalistas» para impulsar esas conversaciones, en las que descarta incluir a los partidos «separatistas» y a Podemos.
«Sólo con los tres podremos conseguir estabilidad y también que haya cambios» porque PP y PSOE, «sin Ciudadanos» no van a hacer cambios que no han hecho en 35 años.
Ha insistido en que hay que montar esa mesa sin poner por delante «los sillones» de nadie, pero al mismo tiempo Rivera mantiene el veto a Rajoy al asegurar que los 3,2 millones de votantes de ciudadanos no servirán para hacer a Rajoy presidente.