El líder de los socialistas catalanes, Miquel Iceta, ha avisado este sábado de que la ruptura del protocolo de relaciones entre el PSC y el PSOE sería un «gran triunfo del imaginario independentista», y por ello el lunes defenderá la hermandad entre ambas formaciones en la reunión que mantendrá con el presidente de la Comisión Gestora del PSOE, Javier Fernández.
En un artículo en 'El País' recogido por Europa Press, ha manifestado que ni el PSOE puede «desentenderse» de Catalunya ni el PSC quiere desentenderse de España, algo que considera que podría interpretase si ambos partidos se separan tras el desencuentro ante la abstención de los socialistas para facilitar la investidura de Mariano Rajoy: el PSC no acató la disciplina de voto y dijo 'no' en el Congreso de los Diputados.
«Dejarnos de lado, alejarnos de la posibilidad de compartir el proyecto colectivo del socialismo español sería un gran triunfo para el imaginario independentista que tanto daño está haciendo a la relación entre Catalunya y el resto de España», sobretodo si el motivo de la separación es haber votado en contra de Mariano Rajoy, uno de los causantes del bloqueo institucional entre la Generalitat y el Estado, alerta Iceta.
Defiende que las razones para mantener la relación PSC-PSOE trascienden del ámbito estrictamente partidario porque, según él, afectaría a la relación entre Catalunya y el resto de España: «Se trata de perseverar un proyecto común que apuesta por una reforma federal de la Constitución, un proyecto en el que todos cabemos y en el que se pone en valor nuestra complejidad y riqueza».
«Consiste en seguir demostrando al pueblo de Catalunya que es posible combinar el respeto de nuestra singularidad con vías que nos permitan a los catalanes y a las catalanas participar en la gobernabilidad de España y ser coautores de su diseño y configuración», prosigue, y recuerda que el congreso que el PSC celebró el pasado fin de semana concluyó la necesidad de seguir hermanado con el PSOE, de la misma manera que subrayó la apuesta de que Catalunya siga en España.
En un período en el que «se avecina un choque de trenes institucional sin precedentes, no sobran los elementos de integración que puedan ser el germen de una concepción federal de España», señala Iceta, que añade que uno de estos elementos de integración es la relación fraternal de los socialistas catalanes con el PSOE.
«En el momento en que el órdago independentista se plantea con toda su crudeza» y después de que el presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, haya rechazado ir a la Conferencia de Presidentes Autonómicos, no conviene que los socialistas debiliten sus vínculos fraternales y federales, sino que, al contrario, deben hacerlos más sólidos, eficaces y solidarios, reclama.
El PSC está satisfecho
Según explica, el PSC está razonablemente satisfecho con el marco de relaciones actual, pero apunta que «sin duda es revisable y susceptible de mejora» y por ello anima a buscar, si es necesario, fórmulas para optimizar la relación, aunque pide que no sea para alejarse ni separarse.
A su juicio, esta posible revisión debería hacerse «con perspectiva histórica, no por una reacción en caliente a una decisión traumática que se ha tenido que tomar en un contexto político muy determinado por una coyuntura política adversa», y llama a evitar que se relacione este proceso con la búsqueda de conseguir una ventaja en una disputa orgánica interna.
Asimismo, insta a aprender de los errores y poner las bases para superarlos, y a perseguir el objetivo de ser un partido útil para los ciudadanos y los militantes socialistas, que se encuentran actualmente «en un estado de zozobra, desorientación y tristeza inédito desde el advenimiento de la democracia».
«Tenemos dos opciones: seguir profundizando en nuestra división y, por tanto, en la senda del fracaso, o comenzar a caminar hacia la restauración de la confianza y de nuestra cohesión y unidad internas», y el PSC apuesta por este segundo escenario, asegura.