El Gobierno ha aprobado este viernes un real decreto ley de medidas fiscales por el que modifica el impuesto de sociedades y los impuestos especiales -con subidas del alcohol y el tabaco- para recaudar 4.650 millones de euros adicionales.
El ministro de Hacienda y Función Pública, Cristóbal Montoro, ha explicado en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros que la mayor parte del incremento recaudatorio, 4.300 millones, corresponderá a cambios en el Impuestos de Sociedades, mientras que los 350 millones restantes provendrán de los Especiales.
Estos cambios fiscales forman parte de un plan para incrementar la recaudación tributaria en 7.500 millones de euros para cumplir los objetivos de déficit público.
El real decreto ley de medidas fiscales incluye los cambios en el impuesto de sociedades, dirigidos a acercar al tipo real el nominal -que se mantiene en el 25 %- mediante la eliminación de una serie de deducciones.
Montoro ha calculado que con estas modificaciones la recaudación anual alcanzaría entre 25.000 y 26.000 millones de euros, «muy lejos» todavía de los 44.000 millones que se recaudaban en 2007 antes de la crisis.
En concreto, la normativa limitará la compensación de las bases imponibles negativas de periodos anteriores y la aplicación de deducciones para evitar la doble imposición internacional.
Además, modificará la tributación de la regresión de pérdidas por deterioro de los valores representativos de participaciones en el capital y evitará las deducciones por transmisión de pérdidas derivadas de la transmisión de fondos propios de entidades residentes y no residentes.
En cuanto a los impuestos especiales, se modificará el que afecta a las labores de tabaco para «adecuar la tributación a la tributación que recomienda la Unión Europea» mediante el denominado sistema de doble mínimo, que evita la venta por debajo de un determinado precio.
Así, en ese impuesto se incrementa el componente específico con respecto al «ad valorem», en una cuantía del 2,5% para los cigarrillos y el 6,8 % para la picadura de liar.
En cuanto al alcohol, el Gobierno ha incrementado un 5 % la fiscalidad de los productos intermedios y el alcohol tanto en la Península como en Canarias.
Además, Montoro ha anunciado que el Gobierno promueve un proyecto de ley sobre las bebidas carbonatadas y azucaradas, con el que espera recaudar 200 millones de euros el próximo año, medida que ha justificado como «instrumento de lucha contra la obesidad y todo lo que significan los problemas del exceso de azúcar».
El ministro ha anunciado su intención de poner en marcha «una reforma en el ámbito de la imposición medioambiental» a lo largo del próximo año, que no ha detallado, y ha anunciado que el Gobierno ha prorrogado la vigencia del impuesto sobre el patrimonio, que recaudan las comunidades autónomas.
Todas las medidas tributarias que contiene el decreto ley se debatirán en el pleno del Congreso del jueves 15 para que pueda entrar en vigor cuanto antes, ha dicho Montoro, al tiempo que ha negado que el Gobierno haya incumplido sus promesas electorales al modificar este gravamen y subir algunos impuestos especiales.
«¿Es que nos hemos comprometido a que las grandes empresas no acerquen sus tipos nominales a los reales en el Impuesto de Sociedades?», ha ironizado, tras insistir en que el Gobierno no ha tocado el IRPF ni determinados ámbitos del IVA, por lo que, según él, «no estamos incumpliendo ninguna promesa».
Montoro ha sido tajante al subrayar que queda mucha legislatura y que el Gobierno promoverá la reducción del IRPF como fue su primera promesa electoral.