El exsecretario general de Alianza Popular Jorge Verstrynge ha asegurado este martes que su juicio es un acto de «represión» contra aquellos que critican la Monarquía y ha recalcado que es inocente y que no empujó a ningún policía durante la manifestación tras la proclamación de Felipe VI en julio de 2014.
El expolítico se enfrenta a una petición del fiscal de tres años y medio de prisión por un delito de atentado contra la autoridad y otro de lesiones. «No tengo problema, tengo un montón de libros por leer», ha desafiado Verstrynge al ser preguntado antes del juicio por la posibilidad de ir a la cárcel.
Junto a él, se sientan en el banquillo otros dos detenidos en esa protesta, para quienes el representante del Ministerio Público pide dos años de cárcel en un caso por los mismos delitos que Verstrynge y ocho meses en el otro por un delito de resistencia.
Los tres han dicho al comienzo de la vista oral que no se consideran culpables de los delitos que se les atribuyen.
Antes del juicio, en declaraciones a los periodistas, el principal acusado ha recalcado que los tres son inocentes y ha opinado: «Cuando el poder no puede justificar algo como la Monarquía, usa la represión».
Ha recalcado que él no empujó a ningún policía para saltarse el cordón policial organizado ante la manifestación no autorizada que se celebró en la Puerta del Sol. «Yo intenté irme a casa con mi hijo menor, nada más», ha afirmado.
La clave, en su opinión, es que se trataba de una manifestación republicana y que él llevaba una camiseta con la bandera republicana. «La Policía iba a por las banderas», ha dicho.
Su abogado, Endika Zulueta, ha relacionado el juicio con el cuarenta aniversario de los asesinatos de los abogados laboralistas de la calle Atocha. «Esos compañeros lucharon para pasar de la dictadura a la democracia. Es una vergüenza que 40 años después, su trabajo no haya finalizado y todavía estemos en estrados defendiendo las libertades civiles», ha declarado.
Un nutrido grupo de personas del publico ha aplaudido a los tres procesados al entrar en la sala y han coreado «República, República», por lo que han sido advertidos por la seguridad de que serían desalojados si no guardaban silencio.
También fuera de los juzgados de lo Penal de Madrid se han concentrado varios simpatizantes, entre ellos el exdirigente de Podemos Juan Carlos Monedero, con una pancarta que defiende: «Ser republicano no es delito».