Las horas previas a la apertura de colegios en Cataluña para llevar a cabo el referéndum ilegal convocado por la Generalitat se ha caracterizado por la actitud pasiva de los Mossos d'Esquadra, que han incumplido sus propias directrices para que los lugares designados para votar estuvieran cerrados a las seis de la mañana.
Los mossos han empezado a hacer acto de presencia en algunos centros aproximadamente unos 45 minutos después de las seis de la mañana, la hora que el mayor de la policía catalana, Josep Lluís Trapero, fijó como límite para precintar los centros de votación y requisar urnas y papeletas, cumpliendo la orden del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC).
Sin embargo, allí donde han acudido los agentes de la Policía autonómica, en unos casos se han marchado ante la oposición de la gente concentrada y en otros se han quedado en las puertas de colegios.
Las primeras urnas ha llegado pasadas las cinco de la mañana, cuando la Asamblea Nacional de Cataluña (ANC) y otras entidades independentistas habían pedido que la gente se echara a la calle para, con su "resistencia pacífica", evitar la intervención de los Mossos. Los centros electorales están previstos que abran a las 9.00 horas.
URNAS SIN CONTROL Y EN COCHES PARTICULARES
Las urnas están llegando a las puertas de los colegios electorales en muchos casos en coches particulares y sin ningún control. Así ha ocurrido, por ejemplo, en el IES Poeta Maragall de Barcelona o en la Escuela de Idiomas de Sants. Los presentes han bromeado con que llegaban las "pizzas".
En la ciudad de Lleida, un punto de votación ya tenía urnas dentro, a la espera de montar las mesas en los próximos minutos y de la llegada de miembros de mesas y de voluntarios, han informado testigos.
En Badalona (Barcelona), en una biblioteca se ha preparado una sala con varias urnas y papeletas, identificadas por distritos para que cada ciudadano sepa dónde lo corresponde votar, según imágenes mostradas por TV3.