El barco Aquarius, junto a los otros dos barcos de la Marina italiana que trasladan a los 630 inmigrantes rescatados en aguas del Mediterráneo central, se encuentran ya en aguas españolas, y a lo largo de este sábado pasarán frente a las costas de las Islas Baleares en su camino a Valencia, donde llegarán previsiblemente este domingo sobre las 12.00 horas, según ha informado el presidente de Médicos Sin Fronteras en España, David Noguera.
Las tres embarcaciones han pasado este sábado por la mañana por aguas de Mallorca, y se prevé que lleguen todas más o menos a la misma hora. Según Noguera, las personas que viajan en el barco «están estables» a pesar de que «un viaje tan largo y en condiciones duras no ayuda».
Así, ha explicado que esta ha sido una travesía «demasiado larga» y ha insistido en recordar que su opción preferida «siempre ha sido desembarcarlos en el puerto más cercano». Además, las condiciones meteorológicas, con viento y olas fuertes, «no han ayudado» y han provocado «muchos episodios de mareos y de vómitos».
Asimismo, ha indicado que muchas de las personas viajan en condiciones de estrés muy altas por las experiencias «muy traumáticas» que han vivido no solo en el agua sino en las semanas incluso meses anteriores. No obstante, ha destacado que los equipos que viajan «están preparados» para atenderlos.
Sin embargo, ha insistido en que dentro del buque viajan personas de colectivos especialmente vulnerables como son niños y mujeres embarazadas y personas que han sufrido quemaduras incluso de segundo grado por la mezcla de agua y combustible.
Por ello, ha recalcado que es «fundamental» traerlos a un puerto «seguro» para que «sean acogidos y tratados de una forma digna y todos sus derechos sean respetados».
Noguera ha explicado que la labor de MSF terminará cuando lleguen a València, que quedarán a cargo de las autoridades y de Cruz Roja. El dispositivo de recepción de los migrantes que se ha establecido en el Puerto de València contará con unas 70 u 80 personas, que ofrecerán a los migrantes una primera atención sanitaria, psicosocial y bienes básicos.
Para ello, contarán con la colaboración de unos 400 intérpretes con el objetivo de que cada migrante tenga un traductor fijo y que no cambie durante todo el proceso.
Asimismo, habrá otros 200 o 300 voluntarios más especialistas en temas de acogida de toda España que acompañarán a los migrantes el tiempo que sea necesario en su lugares de acogida.