La Coordinadora Federal de Izquierda Unida (IU) decidirá este domingo qué hacer con el todavía portavoz parlamentario en Asturias y excoordinador federal, Gaspar Llamazares, y otros miembros de Izquierda Abierta (IzAb) tras constatar que han hecho un «incumplimiento manifiesto de los estatutos» de la organización.
El máximo órgano ejecutivo de dirección de Izquierda Unida analizará en el encuentro convocado este domingo un informe elaborado por la Secretaría de Organización, al que ha tenido acceso Europa Press, en el que se acusa a Llamazares de incurrir en una falta «grave o muy grave» de los estatutos por su implicación en el partido Actúa.
En concreto, el informe señala que Llamazares ha incumplido las normas de IU por «el impulso de una opción electoral y la promoción de otro partido electoral que ha declarado su voluntad de competir con IU en las elecciones europeas en contra del acuerdo marco ratificado por la militancia de IU en referéndum». «FALTAS GRAVES O MUY GRAVES»
«Estas situaciones están tipificadas en los estatutos de IU como faltas graves o muy graves y han sido realizadas por la mayoría de los miembros de Izquierda Abierta, que forman parte de la Coordinadora Federal», apunta el informe, haciendo referencia al partido Izquierda Abierta (IzAb), que también lidera Llamazares y que sí forma parte de IU, no como Actúa.
En el caso de que los hechos objeto de expediente pudieran ser constitutivos de una infracción tipificada como grave, conlleva la suspensión de los derechos como afiliado, en todo o en parte, por un periodo desde un mes hasta un año. Pero si se catalogan como muy graves, la suspensión puede llegar a los dos años e incluso suponer la expulsión de IU y el cese durante el mandato de los órganos de los que fuera miembro.
El informe, que consta de 14 páginas, recopila desde mensajes en Twitter y declaraciones públicas de Izquierda Abierta, Actúa y sus impulsores hasta informaciones periodísticas, así como los objetivos aprobados por el nuevo partido en su I Conferencia Política a medidos de diciembre, en la que se decidieron a «afrontar los procesos electorales de 2019 como una nueva ventana de oportunidad para enfrentar los retos de futuro».
Dicha Confederal Política fue el detonante de la crisis abierta entre la dirección de IU y Llamazares. El coordinador federal, Alberto Garzón, avisó dos días después a Llamazares de que sus declaraciones eran «muy graves» y avisó de que participar en un partido que tenía intención de competir electoralmente contra IU era «transfuguismo».
«QUEDA PROBADO», ALEGAN
«Queda probado que Izquierda Abierta y «Actúa» han promovido una candidatura a las elecciones europeas, tal y como ellos señalan, al margen de los órganos y de la militancia de IU y han establecido una política de alianzas en dicho ámbito de nuevo al margen de la organización», asegura ahora la dirección de IU en su informe.
La reunión de la Coordinadora Federal se producirá después de que haya concluido el plazo de diez días que la dirección le dio a Llamazares para aclarar su situación y los supuestos incumplimientos de los estatutos, que ahora han constatado en su informe. El ex líder de IU se ha negado de momento a dar explicaciones y a abandonar la organización, aunque sí decidió dimitir de sus cargos en la dirección federal.