El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha anunciado que el Gobierno solicitará al Congreso la prórroga del estado de alarma, en esta ocasión de un mes de duración y que será la última.
Se tratará de un estado de alarma diferente, ha explicado el presidente del Gobierno: «En este estado de alarma se producirá una desescalada también institucional. La única autoridad delegada en esta etapa será el ministro de Sanidad, Salvador Illa».
Sánchez ha comenzado con un recuerdo a las víctimas de la pandemia, como es ya costumbre en sus comparecencias. Ha destacado que a día de hoy «el índice de reproducción del virus en España es del 0'24 por ciento, más de cien veces menos que al decretarse el estado de alarma», atribuyendo este hecho a las medidas de confinamiento adoptadas por el Gobierno. «El estado de alarma funciona y la prudencia es la única vía de actuación para vencer al virus», ha afirmado.
El estudio de seroprevalencia ha dejado evidente que el virus ha afectado con grandes diferencias según los territorios; uno de cada 20 españoles ha estado contagiado, con o sin síntomas; y que la letalidad ha sido del 1 por ciento.
«Si no hubiéramos aplicado el confinamiento, la infección podría haber alcanzado a 30 millones de compatriotas y costado 300.000 vidas. Posiblemente más», ha asegurado el presidente del Gobierno.
Sánchez ha insistido en solicitar a la población seguir las medidas de seguridad e higiene sin descanso para evitar contagios. «La prudencia debe ser la regla», ha dicho.
Un mes más es lo que el dictador necesita para socializar los ahorros, nacionalizar las empresas y proclamar la república. Estamos condenados a la miseria y la cartilla de racionamiento.