Hasta el 26 de septiembre, el Sistema Español de Farmacovigilancia, según informa la Agencia Española del Medicamento y Productos Sanitarios (AEMPS), ha registrado 17 notificaciones de trombocitopenia inmune (TPI) tras la administración de 'Vaxzevria', vacuna frente a la COVID-19 de AstraZeneca; en ningún caso el paciente falleció.
Hasta esa fecha, se habían administrado en España cerca de diez millones de dosis de esta vacuna. La AEMPS recuerda que la trombocitopenia es una reacción adversa frecuente, ya conocida y descrita en la ficha técnica y prospecto de la vacuna, tras la recomendación de la Agencia Europea de Medicamentos (EMA).
La trombocitopenia inmune es una condición médica en la que el sistema inmune ataca por error a las células de la sangre llamadas plaquetas, que son necesarias para la coagulación normal de la sangre y las destruye. Por este motivo, en pacientes con antecedentes de TPI, se debe considerar antes de la administración de esta vacuna el posible riesgo.
Además, se recomienda vigilar el recuento plaquetario después de su administración; e informar a las personas vacunadas sobre los signos y síntomas de TPI como pueden ser la aparición de hemorragia, petequias o hematomas.
El Comité para la Evaluación de Riesgos en Farmacovigilancia (PRAC) de la EMA inició una investigación tras notificarse varios casos con recuento muy bajo de plaquetas y/o acompañados de hemorragia; algunos de ellos tuvieron un desenlace mortal. Y la mayoría de los casos ocurrieron dentro de las cuatro semanas posteriores a la vacunación.
Esta entidad clínica es diferente al síndrome de trombosis con trombocitopenia (STT), que puede aparecer muy raramente tras la administración de esta vacuna. Las personas que presenten trombocitopenia durante las tres semanas siguientes a la vacunación deben ser evaluadas detalladamente para descartar un posible diagnóstico de STT.