¡Feliz Día del beso! Seguramente muchos no lo saben, pero este miércoles se celebra el Día Internacional del Beso. Una fecha en el calendario que conmemora este pequeño acto de amor entre personas, en especial, tras prácticamente dos años con los besos casi prohibidos. «Beso». Una palabra pequeña y un gesto sencillo, que esconde sensaciones mágicas. La ciencia explica que, al besar o cuando nos besan, nuestro cuerpo segrega la hormona de la oxitocina, conocida como la hormona de la sociabilidad y la confianza. Y es que, ya sea entre la pareja, entre padres e hijos o entre amigos, besar acerca a las personas y crea un clima de complicidad entre ambos. Precisamente para conmemorar esto se celebra el Día Internacional del Beso.
Esta celebración cuenta con apenas 10 años de historia. Su origen se remonta a 2011, cuando el 13 de abril de ese año se celebró en Tailandia un concurso para dar el beso más largo de la historia. Ekkachai y Laksana Tiranarat, una pareja tailandesa consiguió batir el récord mundial, tras 50 horas, 25 minutos y un segundo. Pero la cosa no quedó ahí. Apenas dos años después, en 2013, esta misma pareja volvió a batir su propio récord y se besaron nada más y nada menos que 58 horas, 35 minutos y 58 segundos.
Desde entonces, esta fecha se ha conmemorado internacionalmente. Aunque aún es un tanto desconocida, cada vez se populariza más, gracias a las redes sociales. Además, muchas marcas están aprovechando para promocionar sus productos con este pretexto.
Justificada o no, esta original fiesta se consolida año tras año y sirve, cuanto menos, como excusa para recordarnos dar un beso a las personas que más queremos.