La madre de una niña de 12 años que falleció el pasado lunes en el Hospital Clínic de València de una «peritonitis purulenta» ha denunciado que su muerte se produjo después de llevarla, con fuertes dolores abdominales, vómitos y fiebre, hasta en tres ocasiones a servicios de urgencias, donde no la diagnosticaron ni le realizaron ninguna prueba médica. Beatriz Gascó, madre de Emma, ha señalado a EFE que presentarán una denuncia contra al administración sanitaria por «negligencia médica» porque no quieren que lo que le ha ocurrido a su hija «vuelva a suceder» y si tienen que «cambiar el protocolo y cada niño o adulto que entre con dolor de abdomen le hagan una prueba, que lo hagan».
Según ha explicado, el 29 de enero llevó a la pequeña a urgencias del ambulatorio de Viver (Castellón), a unos seis kilómetros de la localidad de Jérica donde residen, porque tenía dolor abdominal, vómitos y un poco de fiebre, y el médico le dijo que era «un virus» y aunque le preguntó si podía ser apendicitis porque su hijo mayor ya la había pasado «lo descartó. Yo no soy médico y no puedo contradecirle, y volvimos a casa».
Al ver que el 2 de febrero no se encontraba mejor volvió a llevarla al ambulatorio de Viver y el médico, «al ver los informes del día 29, ni se levantó. Me preguntó por qué volvía y le dije que no la encontraba bien, que seguía sin comer y de diarrea y que estaba perdiendo mucho peso. Me dijo que era un proceso vírico y que los virus duraban de ocho a diez días». El día 4 de febrero la llevaron al Hospital de Sagunto «y, con 38,8 de fiebre y un abdomen con defensa, me dijeron que no era nada, que aunque había perdido peso nos fuéramos a casa que no era nada» y el día 5, como seguía sin verla bien, la volvieron a llevar al médico y en la consulta «se desvaneció y perdió el conocimiento».
Al llegar a Viver estaba en parada respiratoria y el médico estuvo doce minutos reanimándola y, tras llegar una ambulancia del SAMU, la estabilizó y la trasladaron al Hospital Clínic de València donde volvió a entrar en parada y después de dos horas intentando reanimarla falleció a las dos de la madrugada. La madre de la pequeña ha explicado que en ninguna de las tres ocasiones que la llevaron a urgencia le realizaron pruebas médicas, como un análisis de sangre o un ecografía, a pesar que insistió en que podía ser una apendicitis. Según indica, en el Clínico le dijeron que Emma había fallecido por una «peritonitis purulenta», causada por una acumulación de sangre, fluidos corporales o pus en el abdomen.
«Esto no puede estar pasando, estamos en el siglo XXI, que por una peritonitis se muera una niña o un adulto», asegura Beatriz, que añade que cuando una madre acude a urgencias «es porque su hijo está malo, no porque tenga ganas de ver al médico. Parece que vayamos pidiéndoles permiso y eso no es así´, si voy y te digo que está mala, hazle un mínimo de caso». «Emma era alegre, siempre estaba con sus amigas grabando tik tok, cantando canciones. Jugaba al fútbol, iba al conservatorio, era muy estudiosa, incluso estando malita estaba haciendo los deberes. Era la alegría de la casa, no tengo ni una foto en la que estuviera enfadada».
Desde la Conselleria de Sanitat han informado a EFE de que «lamentan profundamente» el fallecimiento de la menor, que se ponen a disposición de la familia y que «analizarán todo los que ocurrido». El padre de la niña, Ramón Martínez es concejal socialista en el Ayuntamiento de Jérica y Beatriz, la madre, tiene un estanco en este municipio castellonense, donde realizarán un homenaje a la pequeña en su colegio y cuyo Ayuntamiento decretó el pasado lunes día de luto oficial y mañana sábado ha convocado una concentración en memoria de Emma. El Defensor del Paciente ha pedido al Fiscal provincial de Valencia que abra una investigación de oficio «por presunto delito de abandono y posterior fallecimiento».