Un lince ibérico de pelaje blanco, conocido como Satureja, ha sido grabado y fotografiado por primera vez en la provincia de Jaén, generando nuevo interés científico en torno a la fauna ibérica. El animal, una hembra nacida en 2021, fue documentado recientemente gracias al trabajo del fotógrafo aficionado Ángel Hidalgo, quien logró captar las imágenes tras meses de seguimiento en el entorno natural de la zona. La Junta de Andalucía ya tenía constancia de la presencia de este ejemplar y está analizando las causas de su inusual color.
El encuentro tuvo lugar en octubre de 2024 después de semanas de vigilancia mediante cámaras de fototrampeo. «No me lo podía creer, me quedé paralizado», afirma Hidalgo, que reconoce haberse volcado en la localización tras «visualizar en una de sus cámaras una figura blanca». Durante la jornada de observación, asegura: «Fueron tan solo dos segundos, pero se notaba que la coloración era diferente a la habitual, de tonos marrones y con manchas oscuras». El hallazgo confirmó que se trataba de «ese fantasma blanco del bosque mediterráneo, tenía que ver esa maravilla con mis propios ojos». Después de numerosos intentos frustrados, cuando menos lo esperaba, logró observar «un bulto blanco que parecía irradiar luz propia».
Investigación en curso sobre el cambio de coloración
Satureja forma parte del programa de seguimiento del lince ibérico en Andalucía. Así lo explica Javier Salcedo, responsable del plan de recuperación, quien detalla que la hembra nació con el patrón cromático típico, pero su pigmentación se tornó blanca con el tiempo, conservando las manchas oscuras características. «No es albinismo ni leucismo, y estamos investigando qué es lo que ha podido ocurrir», señala Salcedo, quien sugiere que una causa ambiental podría estar detrás del fenómeno. Añade: «El cambio se ha producido en la melanina que da color pardo y anaranjado, ya que mantiene el patrón de manchas negras».
Casos similares documentados y contexto científico
Los expertos subrayan que, a diferencia del albinismo, en el caso de Satureja la pigmentación de los ojos es normal y no presenta complicaciones asociadas a la falta de melanina. Se menciona un caso anterior, también en Andalucía, de una hembra que experimentó una despigmentación parecida pero que recuperó su color original posteriormente. Ambos ejemplares compartirían origen geográfico y posiblemente parentesco, lo que podría apuntar a una hipersensibilidad genética o ambiental.
Impulso en la recuperación del lince ibérico en Andalucía
La población de lince ibérico continúa creciendo y los últimos censos oficiales de 2024 indican la existencia de 2.401 ejemplares, de los cuales 1.557 son adultos y subadultos, además de 844 cachorros. El número de hembras reproductoras se sitúa en 470, 64 más que el año anterior, acercándose al objetivo de 750 hembras clave para alcanzar una población autosuficiente y en estado de conservación favorable.
Hace 25 años, habían apenas 100 linces ibéricos y tropocientasmil lagartijas pitiusas. Hoy día, el lince se ha recuperado con 2.500 ejemplares, y las lagartijas...