¿Alguna vez has sentido que tu vida va perdiendo color? Aunque todo parece estar «en orden» – trabajo estable, amigos, rutina…algo no encaja. Es como si una parte de ti supiera que hay algo más, algo más profundo que aún no has descubierto. ¿Y si al otro lado de la Puerta Turquesa estuvieran las respuestas que buscas?
Visualiza una Puerta Turquesa…Siente ese color, lleno de vida y serenidad, que simboliza un cambio profundo…Camina con paso firme, abre esa puerta y descubre lo que vas a encontrar al otro lado…
Un espacio donde confiar en ti mismo y en lo que puedes lograr. Atravesarla es elegir abrirte a lo desconocido, aunque el miedo quiera detenerte. Es un acto de valentía pues cruzar esta puerta requiere mirar de frente a lo que te está bloqueando, identificar las excusas que utilizas y las creencias que te limitan. Pero la recompensa es grande: reconectar contigo, confiar en ti y en el Universo y recuperar esa energía que has perdido por el camino… Al atravesarla, inicias un viaje hacia un futuro donde tus miedos ya no son una barrera, sino una invitación para crecer.
¿QUE TE FRENA REALMENTE?
Piensa en eso quieres hacer, pero que llevas tiempo postergando. Quizás sea dar un giro a tu carrera, retomar una pasión olvidada o atreverte a ser tú mismo frente a los demás. Ahora pregúntate:
• ¿Qué excusas te estás poniendo?
• ¿Qué miedo hay detrás de esas excusas?
• ¿Qué harías si no tuvieras miedo?
Las excusas se presentan de muchas formas. «No tengo tiempo», «Es demasiado arriesgado», «Ya lo intentaré más adelante». Muchas veces nos quedamos atrapados en la zona de confort porque parece segura. Pero ¿realmente lo es? Esa rutina que a primera vista te protege también es la que te mantiene estancado, impidiendo que avances.
Cada vez que evitas actuar, alimentas la idea de que «no puedes», y esa creencia va debilitando tu confianza. La buena noticia es que cada paso, por pequeño que sea, tiene el poder de acercarte a lo que realmente deseas. El primer paso puede ser tan simple como decirte a ti mismo: «Voy a intentarlo». Y a partir de ahí, todo empieza a cambiar.
ABRE LA PUERTA TURQUESA
El cambio no se da de la noche a la mañana. La clave es comenzar a mover la energía dando pasos conscientes. Aquí tienes algunas ideas para empezar:
Reflexiona y sé honesto contigo mismo
La honestidad es el primer paso hacia el cambio. Dedica un tiempo cada día para conectar contigo. Escribe sobre tus sueños, miedos, juicios…Deja que tus pensamientos fluyan. Pregúntate: ¿Qué es lo que realmente deseo? La claridad surge cuando nos permitimos escuchar más allá del ruido mental.
Cambia tu diálogo interno
Las palabras que usas contigo tienen un impacto directo en cómo te percibes. Cada vez que te digas algo negativo, recuérdate que lo que piensas influye en lo que sientes y por tanto crea tu realidad. Cambia el «no puedo» por «lo voy a intentar» y el «es imposible» por «es un reto que voy a afrontar». Háblate con amor y confianza, es el primer paso hacia la transformación. Y si surge una duda recuerda: Eres capaz de más de lo que crees.
Empieza con pequeñas acciones
Comienza algo con sencillo, por ejemplo, algo que desees hacer, quizás tomar una clase de cocina, de yoga, o simplemente parar y respirar. La clave es no esperar al momento perfecto, sino actuar. Cada pequeña acción te dará más confianza en ti mismo y envía un mensaje al Universo «Estoy listo para más»
Rodéate de inspiración y apoyo
Busca personas que te inspiren y ambientes que te motiven. Rodéate de quienes creen en ti y en tus capacidades, y evita a quienes alimentan tus inseguridades. La compañía adecuada acelera tu crecimiento personal.
Celebra cada paso, cada avance
Reconoce tus logros por pequeños que te parezcan. Haz una lista de ellos para recordarte todo lo que eres capaz.
ATREVETE A DAR EL PRIMER PASO
Para que esta lectura no sea solo teoría, como siempre, te propongo un ejercido práctico para abrir la Puerta Turquesa.
1. Piensa en algo que deseas hacer, pero has estado postergando.
2. Identifica la excusa que te has dado para no hacerlo. ¿Es falta de tiempo, miedo al fracaso, o al qué dirán?
3. Reconoce el miedo detrás de la excusa. Escríbelo para sacarlo de tu mente y que pierda fuerza.
4. Proponte una acción para avanzar hacia ese deseo y ver a ese miedo con otros ojos, con ojos de «¡Yo puedo!». Empieza con algo sencillo que te haga sentir cómodo.
5. Pon una fecha límite. Comprométete a hacerlo en los próximos días y observa como al hacerlo poco a poco vas ganando confianza en ti mismo.
¿QUE VAS A ENCONTRAR AL OTRO LADO DE LA PUERTA TURQUESA?
Al otro lado te espera una vida más conectada contigo mismo:
Dejarás atrás creencias limitantes como «No soy suficiente» y tu nuevo mantra será «YO SOY CAPAZ»
Aprenderás a disfrutar del presente con mayor paz y cambiará la relación con tus miedos.
El cambio y la confianza sean tus aliados. Verás cada cambio como una oportunidad para crecer.
Al otro lado de la Puerta Turquesa vas a encontrar una versión más fuerte y segura de ti mismo, alguien capaz de enfrentar los retos de la vida con valentía. No será un camino sin obstáculos, pero será tu camino, y eso lo hace único.
Elige abrir esa puerta turquesa y permitirte descubrir lo que el Universo tiene preparado para ti. No hay mejor momento que ahora.
¿Estás listo para abrir nuevas puertas y oportunidades en tu vida?
Por Estibaliz Romaña Coach de desarrollo personal, divulgadora y artista.
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¡Feliz domingo y Abrazo del Alma!