La herramienta 'IN2Tant Vídeo', desarrollada por IN2 --socio fundador del proyecto 'IA+Igual'-- busca ayudar a las personas con discapacidad a superar las barreras que dificultan su inclusión laboral por lo que los responsables de 'IA+Igual' abogan por "enseñar a la IA a identificar el talento para que ayude en un proceso de selección".
"Y si lo hacemos correctamente, nunca eliminaría del proceso a una persona invidente, autista o parapléjica, si sus habilidades y conocimientos encajaran en el perfil buscado. Esa independencia de criterio supone una oportunidad para evaluar a las personas por su talento, sus capacidades y lo que puede aportar en el mercado laboral, y no por sus particularidades personales", destaca la CEO de IA+Igual, Marisa Cruzado.
El proyecto 'IA+Igual' es un proyecto cofinanciado por la Dirección General de Evaluación, Calidad e Innovación de la Consejería de Familia, Juventud y Asuntos Sociales de la Comunidad de Madrid, a través del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia de la Unión Europea.
Se trata de un proyecto piloto que desarrollan las empresas CVA, IN2 y ORH con el objetivo fundamental de analizar y verificar los algoritmos de Inteligencia Artificial aplicados en el ámbito de Recursos Humanos para identificar los sesgos en su programación e impulsar una IA más ética e igualitaria dentro del ecosistema empresarial, como destacan en un comunicado.
En el caso de la herramienta IN2Tant Vídeo, empleada por la Generalitat de Cataluña, sus impulsores detallan que tiene múltiples funcionalidades que facilitan la comunicación entre este colectivo y las administraciones y empresas. Por ejemplo, con su trascripción de conversaciones, ninguna persona con discapacidad auditiva está privada de poder participar en una videoconferencia.
Sin embargo, "hay pocos datos sobre la discriminación por discapacidad porque las empresas no los facilitan", como lamenta el director del Gabinete de Estudios de USO y miembro del Consejo Asesor de 'IA+Igual', José Luis Fernández, a quien le preocupa si los sesgos en los procesos de selección son inconscientes o conscientes.
"Las compañías deben valorar a las personas por ser persona", ha destacado, por lo que el objetivo final del proyecto es "detectar si hay filtros conscientes discriminatorios y monitorearlos para eliminar los que son fruto del manejo de datos históricos incorrectos".