Las plataformas de reseñas de establecimientos gastronómicos son una fuente inagotable de hilarantes comentarios. En este caso una clienta se queja porque se manchó los pantalones con arroz «y ahora no sale la mancha», lo que justificó que le pusiera «tres estrellas», ya que «por lo demás todo bien».
Ante semejante disparate el dueño del establecimiento respondió: "Se nos está ocurriendo un nuevo modelo de negocio: restaurante con lavandería. Clientes contentos, nosotros contentos. Esperamos que los pantalones fueran del Primark. Saludos y hasta la próxima", concluyeron.
Lo que demuestra que en las redes siempre hay que conservar una buena dosis de ironía.