El baño es una de las zonas que más germenes puede haber y es necesaria la desinfección continua. Una de las partes que a veces se nos olvida es la alcachofa de la ducha, que también necesita su limpieza continua para quitar todos los hongos y bacterias.
Hay zonas de España que la cal hace empeorar el agua y hace difícil la limpieza, pero con estos pasos quedará la alcachofa como nueva.
Para empezar, se debe eliminar el polvo y la suciedad general de la ducha y después usar una mezcla de vinagre y agua para dejar la alcachofa impecable. Para empezar, una vez limpiada la ducha, hay que eliminar los restos de cal, que suelen ser los más difíciles de eliminar, y la mejor opción será usar un pulverizador. Por último, hay que tener paciencia y dejar que actúe una hora el producto. Después se pasa un paño húmedo y la alcachofa quedará como recién comprada.