Así es, utilizar una almohada corriente puede generar un mal alineamiento del cuello y de la columna vertebral, lo que a su vez puede ocasionar dolores en la cabeza, espalda o cuello, y en consecuencia tu sueño también puede verse afectado. Si te estás preguntando cómo evitar este problema, aquí encontrarás todas las respuestas y consejos que estás buscando. La clave para dormir de la manera más beneficiosa para tu salud, son sin lugar a dudas las almohadas cervicales. Estas últimas están diseñadas para proporcionarte un soporte a la cabeza y cuello, al que se amoldan gracias a su forma curva y de esta manera puedes dormir de forma segura. Pese a que este tipo de almohadas es recomendable para las personas que ronquen, duerman de lado o bien experimenten dolores de cabeza, su uso está indicado para cualquier persona.
Actualmente en el mercado puedes encontrarlas de varios materiales y formas disponibles. Si estás buscando una y quieres saber cual es la más apropiada, sigue leyendo. Cada una de ellas tiene sus ventajas y aunque la elección depende de cada persona, cabe destacar las de látex, que son hipoalergénicas y sólidas; las viscoelásticas, son consideradas las más flexibles ya que se adaptan al cuello perfectamente; y las que están fabricadas de ambas combinaciones de materiales y comparten los beneficios de los dos materiales y son las más ventajosas.
Hay varias formas de almohadas cervicales disponibles, como por ejemplo con forma de cuña, de onda o bien las cilíndricas. La que escojas depende enteramente de ti. Los precios van de entre 20 a 100 euros.
A menudo se suele hablar de la importancia de la cantidad del sueño, pero ¿qué es de la calidad del sueño? La fórmula para obtener un sueño reparador no es ningún secreto, simplemente debes seguir ciertos procedimientos y aplicar algunos consejos. Utilizar una almohada cervical, es el primer paso hacia encontrar una rutina de sueño más equilibrada. Al emplear una de estas características, la calidad de tu sueño se verá notablemente mejorada.