La influencer brasileña-española Fernanda ha compartido detalles desgarradores de la pesadilla que vivió cuando fue víctima de una violación en grupo mientras viajaba por la India con su esposo en moto, según recoge El Litoral.
En declaraciones a un medio español, Fernanda describió el terror que sintió durante el ataque. «Pensábamos que nos mataban, estábamos seguros. Nos decían que nos iban a matar», expresó.
La tragedia comenzó cuando Fernanda intentó pedir ayuda al servicio de emergencias, pero no pudo precisar su ubicación exacta. Luego, intentó defenderse con una pica cuando vio a uno de los atacantes con un cuchillo, pero fue sorprendida por detrás y reducida por el grupo.
Relató que la violaron durante aproximadamente tres horas, turnándose entre ellos. «Me quitaron la ropa, se iban turnando y ahí estuvieron casi tres horas. Perdí la cuenta. Preguntaba por Vicente, si estaba bien... Después de este tiempo, uno me da ropa y me dice que me vista. Pero se da la vuelta y vuelve a violarme», recordó.
La brutalidad del ataque no tuvo límites, ya que los agresores la sometieron a golpes y la arrastraron por el suelo. Fernanda lamentó profundamente el impacto devastador que este evento ha tenido en sus vidas y en las de sus agresores, asegurando que sus vidas han sido destrozadas irremediablemente.
El ataque también dejó a su esposo herido después de ser golpeado mientras intentaba protegerla. Según su testimonio, los atacantes no estaban interesados en robar, ya que no se llevaron sus pertenencias valiosas.
En un gesto de solidaridad, las autoridades locales les entregaron una compensación financiera y una copia del caso. Sin embargo, el trauma y las cicatrices emocionales que dejó este cruel incidente son irreparables.
La pareja recibió una compensación de un millón de rupias, aproximadamente 12.000 dólares, según lo estipula la ley india para víctimas de violación en grupo, destinada a ayudar en su rehabilitación y atención psicológica. Este incidente subraya la importancia de abordar la violencia sexual y proporcionar apoyo adecuado a las víctimas en todo el mundo.