El mes de septiembre es el mes en el que las arañas comienzan a dejarse ver por los hogar por el cambio de tiempo. Estas suelen esconderse por los huecos y grietas buscando un refugio, pero también quiere alimento.
El sofá es uno de los lugares favoritos de estos insectos y el motivo no es muy complicado. « Las arañas a menudo se sienten atraídas por su hogar debido a los insectos que necesitan comer para sobrevivir. Las migas y otros restos de comida pueden deslizarse por las grietas del sofá, convirtiéndose en una fuente de alimento para los insectos que atraen», según James Sheldon, director de una tienda de sofás, a través de Daily Star.
El empresario apunta que estas son carnívoras, por lo que los huecos de estos muebles son sus favoritos, ya que son cálidos y es donde más probabilidad hay que queden restos de comida. Lo mejor para que esto no suceda es quitar el polvo, así como los restos de comida y manchas que pueden aparecer en el sofá.