La presentación de las conclusiones de los partidos que integran la comisión investigadora del Parlament sobre la construcción de Son Espases ha confirmado, por desgracia, el afán de desgaste político de los adversarios que esconden este tipo de trabajos parlamentarios. Las diferentes formaciones –PP, PSOE y Més– entrecruzan responsabilidades y reproches sobre una de las obras emblemáticas de la legislatura que entre 2003 y 2007 presidió Jaume Matas, con mayoría absoluta del Partido Popular. El fiscal Pedro Horrach, de Anticorrupción, está realizando desde hace meses pesquisas sobre esta cuestión y ya ha tomado declaración a sus principales protagonistas.
La sede del PP. Las declaraciones ante la comisión del extesorero del PP nacional y del exconcejal de Urbanisme en Cort, Luis Bárcenas y Javier Rodrigo de Santos, respectivamente, sacaron a la luz la posible financiación ilegal de la sede regional del Partido Popular; tema sobre el que ya trabajaba la Fiscalía y que ha derivado en la apertura de la pieza 28 del ‘caso Palma Arena' por parte del juez instructor, José Castro. Esta quizá sea el aspecto más relevante de todo lo que ha trascendido, entre otras razones, porque el expresident Matas, la exconsellera de Salut Aina Castillo y el exgerente del IB-Salut Sergio Bertrán decidieron guardar silencio y no responder a las preguntas de los diputados.
Política y justicia. Las conclusiones finales de la comisión serán, en exclusiva, las que presente el PP –tiene mayoría de diputados–; aunque ello no significa que sean las que más se ajusten a la realidad de lo ocurrido en todo el proceso de la construcción del hospital ni en la adquisición y remodelación de su sede. Es una torpeza querer mantener en paralelo indagaciones de índole política –sin recursos y que sólo se sostienen en testimonios– y judicial –como las que tienem abiertas la Fiscalía y el juez Castro. Las conclusiones finales demuestran que las comisiones de estas características responden al juego de intereses partidistas; incluso cuando están en juego asuntos tan delicados como el de la corrupción.