El presidente del Consell d'Eivissa, Vicent Marí, lamentó ayer públicamente que no haya podido aún dar sus explicaciones ante el juez por el caso del vídeo de ‘La vida Islados'. Marí tendría que haber declarado este jueves, pero un cambio de abogado por parte de la interventora del Consell obligó a cambiar las fechas de las declaraciones. La situación más surrealista se produce cuando el PSOE, que intenta sacar rédito político de este asunto (no conviene olvidar que los socialistas lo denunciaron ante la Oficina Anticorrupción que ellos mismos controlan) y no ocultan su interés en que Marí pueda declarar pocas semanas antes de las elecciones o incluso en plena campaña. Ese es su objetivo.
Intereses ocultos
Vicent Marí tiene motivos más que suficientes para ver intereses ocultos en la instrucción de este caso. Porque no conviene olvidar que el presidente del Consell no fue llamado por la Oficina Anticorrupción para dar sus explicaciones ante las denuncias de los socialistas. Después el asunto pasó a la Fiscalía, que ha presentado la correspondiente querella contra Marí. El presidente del Consell lleva tiempo solicitando la posibilidad de dar su versión de los hechos, pero de momento no ha podido hacerlo.
Los precedentes
Ya habrá tiempo suficiente para que Vicent Marí demuestre su inocencia y que explique si la contratación de la campaña de promoción se ajustó a derecho, pero hay precedentes (y bastantes en los últimos años) para temer que la instrucción se pueda politizar. Acabamos de asistir en Mallorca a una falsa acusación contra dos altos cargos del PP que ha sido finalmente archivada porque no había ninguna prueba, aunque lamentablemente decenas de personas se vieron envueltas de forma injusta. En cambio, los casos que afectan al PSOE se alargan en el tiempo (ahí está el ‘caso Multimedia') sin que apenas haya avances. La justicia debería actuar igual para todo el mundo, pero parece que el PSOE sigue interesado en politizarla para poder recuperar el Consell d'Eivissa a cualquier precio.