La reunión celebrada este jueves entre Govern y los cuatro consells sirvió para constatar de nuevo la desesperación de los presidentes pitiusos al no disponer de suficientes medios materiales, logísticos y humanos para atender a los menores migrantes no acompañados que llegan a las Pitiusas. En la actualidad, Formentera tiene bajo tutela a 136 menores e Ibiza, 78. Óscar Portas, presidente del Consell de Formentera, destacó que la pitiusa sur es la isla más pequeña «y la que menos recursos tiene» y destacó la ayuda del Govern en materia económica con dos millones de euros, que ayudará a pagar las facturas acumuladas del año pasado y de este inicio de 2025. El presidente Vicent Marí, por su parte, destacó de nuevo que Ibiza está «al límite; nuestros sistemas de protección y de atención a menores están desbordados», al tiempo que destacó que la situación «empeora cada día» y suplicó al Gobierno central «que se implique, nos atienda y no nos tenga abandonados como ha hecho hasta ahora».
El Gobierno
Alfonso Rodríguez, delegado del Gobierno en las Islas, no acudió al encuentro de Govern y consells para abordar la avalancha de pateras. Este desplante gubernamental a las instituciones insulares es una muestra más del desprecio del Gobierno central hacia las Islas. A este plantón institucional se suman, además, los insultos proferidos por la ministra de Infancia, Sira Rego, llamando «racista» a la presidenta Marga Prohens por reconocer públicamente que Baleares no tiene capacidad económica ni logística para atender a más ‘menas’ al ritmo de llegadas de pateras que están experimentando hasta ahora las Islas. En paralelo, el ministro de Justicia, Félix Bolaños, ha amenazado al Govern tras conocer que presentará un recurso al Supremo, diciendo que el reparto de menores es una ley y, como tal, se debe cumplir.
Sin capacidad
Baleares en su conjunto no tienen capacidad para acoger a más menores llegados en patera ya que no dispone de espacios adecuados en sus centros ni de personal suficiente. La ruta Argelia-Baleares es la que más crece de toda Europa: si en 2018 llegaron a las Islas unos 2.000 migrantes irregulares en lo que llevamos de año ya se superan los 4.000 (un total de 1.500 han llegado en los últimos 15 días). El Gobierno central no puede obviar esta realidad y debe escuchar las peticiones de auxilio de las Islas Baleares.