Palma acoge hasta el domingo la convención de la Asociación de Agentes de Viajes Británicos (ABTA), un encuentro en el que las instituciones de Balears han puesto toda la carne en el asador de cara a mejorar la temporada turística de 2004. Un total de 1.800 agentes de viajes visita Mallorca durante estos días, todos ellos vendedores de un «producto» que se vende bien en el Reino Unido.
ABTA es la mejor forma de promocionar Mallorca, teniendo en cuenta que los agentes de viajes tienen la posibilidad de comprobar in situ cómo ha evolucionado el destino que venden, y sabiendo que el turismo británico es el único que ha crecido este año, paliando en cierta forma la caída del turismo alemán. De hecho, las Islas han sido el destino favorito de los turistas británicos que han venido a España, un punto a favor de los que confían en los excelentes resultados de esta convención.
Si se cumplen los pronósticos, se producirá en 2004 una reactivación de las ventas turísticas a Mallorca (tal y como ha ocurrido cada vez que se ha organizado esta convención), lo que compensará el tremendo esfuerzo económico de los organizadores del evento, que han invertido algo más de un millón de euros en que los agentes de viaje sigan manteniendo e incrementen su confianza en la oferta de sol y playa, y la que descubre la gastronomía, cultura, tradiciones, agroturismo y deportes en la Isla.
Mallorca no puede competir con destinos baratos; debe dar a conocer su riqueza y sus diversas posibilidades vacacionales. Por ello, ABTA es un excelente escenario para promocionar la Isla y para comenzar a hablar en términos cualitativos y cuantitativos de la próxima temporada turística.