El 10N es un día clave para todas y todos porque determinará, no sólo quién gobernará, sino cómo y para quién. Y eso convierte la cuestión en algo importante, pero muy sencillo. Dos son las opciones: Un gobierno para los de arriba, con mayor o menor descaro, pero para los de arriba a fin de cuentas, o un gobierno que priorice los intereses del 99% frente a los del 1%. No hay más. Ése es el verdadero dilema en este 10N, ni más ni menos. Un gobierno para el IBEX y la CEOE o un gobierno para la gente.
Ya sabemos de qué pie cojea el PSOE si se le deja escoger para quién gobernar. También sabemos cómo gestionan, tanto PP como PSOE, las crisis económicas: sabemos quién paga el pato y quién se enriquece en tiempos de vacas flacas. Sabemos también que se acerca otra recesión económica. Preferimos no saber qué le gustaría hacer a Pedro Sánchez para gestionarla.
Si algo positivo tiene el haber repetido elecciones cuatro veces en cuatro años (eso sin tener en cuenta las locales, autonómicas y europeas), es que algo hemos aprendido de los partidos que se presentan este 10N. Hemos aprendido la diferencia entre la campaña y la legislatura, para algunos partidos. Hemos aprendido la poca diferencia que hay entre Vox, Ciudadanos y PP. Hemos aprendido lo poco que le cuesta pactar a la derecha. Hemos aprendido lo que valen las promesas de Pedro Sánchez. Hemos aprendido también cuánto cuesta un gobierno. Por todo eso y mucho más, hemos aprendido lo importante que será votar Unidas Podemos este domingo. Porque nos jugamos un país. Porque nos merecemos un gobierno que esté a la altura, que asegure unos sueldos con los que poder comer, con los que pagar el alquiler, con los que vivir dignamente. Porque nos merecemos un gobierno que asegure unas pensiones dignas, una sanidad y una educación de calidad, una transición real a las renovables, que luche contra la violencia machista, contra los fondos buitres y contra las puertas giratorias. Porque nos merecemos, por una vez en toda la historia de nuestra democracia, un gobierno que tenga en cuenta los intereses de la mayoría, un gobierno del que sentirnos orgullosos.
Y la única opción es Unidas Podemos. No porque seamos los únicos que decimos trabajar por la gente; no porque lo hayamos demostrado en los Ayuntamientos más importantes del país, ni siquiera porque sea la gente y no los bancos quienes financian nuestras campañas, sino porque es lo que vinimos a hacer, porque es lo que dijimos que haríamos y porque es hora de que tengas un gobierno del que no avergonzarte.
Si quieres acabar con las jornadas laborales de 13 horas, vota Unidas Podemos. Si quieres acabar con los alquileres imposibles, con la evasión fiscal de los más ricos, con las puertas giratorias, no te lo pienses el 10N. Si quieres evitar que la derecha forme gobierno, si quieres que el salario mínimo sea de 1.200€. Si quieres una jubilación digna, aumentar la ayuda por dependencia, más inversión en Sanidad, una verdadera apuesta por las renovables, educación gratuita de 0 a 3 años, no te lo pienses, vota Unidas Podemos. Si de verdad quieres un gobierno del que no tengas que avergonzarte, si todo esto te parece de sentido común; si quieres comprobar, que claro que se puede, este domingo, no te quedes en casa, vota Unidas Podemos.