Síguenos F Y T I T R
Hoy es noticiaEs noticia:
Opinión

La contradicción a escena

| Ibiza |

Alguien podría pensar que ya entrados en el siglo XXI, pocas cosas nos pueden sorprender; pero los que así piensan están muy equivocados y el día a día pone ante nuestros ojos temas que siguen sorprendiendo. Lo último conocido es la propuesta de explotación turística ofertada por una naviera de las que opera en nuestro puerto de Eivissa. La naviera en cuestión es Trasmed y la oferta consiste en habilitar los camarotes del barco como hotel para los pasajeros durante dos noches, para que los mismos pasen un fin de semana en nuestra isla.

De tal iniciativa de la naviera, hay varias cosas que sorprenden. En primer lugar es del todo innecesario ampliar la oferta de plazas turísticas, dada la amplísima oferta ya existente. Pero resulta todavía más sorprendente que se haya autorizado por parte de la administración competente una iniciativa del calado empresarial y social que esta tiene en la isla. Resulta chocante que sea precisamente ahora que el tema de debate político y empresarial gira alrededor de la necesidad de poner freno a la sobreexplotación de la actividad turística en las Pitiusas.

Si bien es cierto que hasta la fecha tan solo se han lanzado débiles señales de alarma en cuanto al tema, no es menos cierto que de puertas para afuera hay coincidencia en la necesidad de luchar contra la saturación turística; saturación que resulta especialmente problemática en la Pitiusas. Y digo que la coincidencia es solo de puertas para afuera y de cara a la galería ya que lo que se está haciendo en realidad es aprobar medidas o propuestas que no van encaminadas a luchar realmente contra la saturación; sirva como ejemplo la confirmación de las miles de plazas autorizadas como alquiler turístico residencial, con lo que se atenta gravemente contra el derecho a una vivienda de los residentes.

Pues bien, por si la endeblez con la que se viene tratando el problema de la saturación no fuera suficiente, ahora aparece quien se empeña en fomentar la citada saturación. Tal como se desprende de toda la información aparecida en prensa sobre el nuevo producto ofrecido por la naviera, la oferta se lanza avalada por los correspondientes permisos concedidos por parte de la administración. Y aquí viene otra sorpresa, si quien dice estar a favor de la contención de la sobreexplotación turística, es al mismo tiempo quien controla la gestión de la entidad pública Autoridad Portuaria de Baleares, nombrando al presidente de la misma y autorizando a la mayoría de los componentes de su Consejo de Administración; resulta incomprensible que no se haya controlado algo tan relevante como es esta oferta de la naviera y la aprobación de los permisos necesarios por parte de la APB.

De nada sirve que desde Eivissa se proteste por la aparición de este nuevo paquete turístico, si desde Palma no se hace el menor caso a las peticiones que salgan de aquí; importando muy poco que quien gobierna en Eivissa y en Palma sea el mismo partido el PP. Aquí solo importa el beneficio económico que la APB le pueda sacar al puerto de Eivissa, nada más. También resulta del todo incoherente el posicionamiento del Ayuntamiento de Vila, también gobernado por el PP, que si bien afirma que ese no es el modelo turístico que se quiere, lo que hace es firmar un acuerdo con la naviera para ofrecer visitas guiadas a los visitantes, acogidos a la oferta de la naviera, por el casco antigua de la ciudad    y Dalt Vila durante el fin de semana de estancia en el puerto.

También resulta chocante que no hace mucho se vislumbrara la posibilidad de que se pudiera reabrir el tráfico marítimo comercial en el puerto de Sant Antoni, debido a la saturación que sufre el puerto de Vila y, no deja de sorprender que ahora en plena temporada estival y por tanto el periodo de mayor actividad en el puerto, no haya problema para que un barco de pasaje con algo más de 200 camarotes a explotar turísticamente, permanezca atracado en el puerto durante el fin de semana.

De nada sirve que se quiera vender la moto de que se está actuando contra la saturación, poniendo como ejemplo la eliminación de 9.000 plazas que estaban en la bolsa sin comercializar, cosa que por cierto no tiene la menor incidencia ya que sin ellas ya se producía la saturación estival; o que se alardee ahora de la ley de control del acceso de vehículos a la isla, que tampoco afectará en absoluto a la saturación de este verano. De nada sirve todo ello, si por otro lado se están autorizando plazas que se sacan de la bocamanga, como hace un tramposo jugador de cartas en sus partidas.

Con todo ello también es llamativo que la aprobación de los permisos necesarios, que es de suponer que hayan pasado por alguna reunión del Consejo de Administración de la APB, estando representados en el mismo tanto el Consell d’Eivissa como el Govern, resulte que nada se sabía hasta que apareció la oferta de la naviera en la prensa. Muchas explicaciones deben dar ambas administraciones, la insular y la autonómica, por haberse desentendido de algo tan grave y que va en la línea contraria a lo que públicamente vienen defendiendo. Parece que en Palma solo estén para atender las exigencias de Vox.

Sin comentarios

No hay ningún comentario por el momento.

Lo más visto