El pueblo de Sant Joan de Labritja celebró ayer la misa en honor a San Esteban, que abarrotó la iglesia, con el aliciente de las tradicionales caramelles de Nadal y el ball pagès.
La misa fue oficiada por el párroco de Sant Joan Vicent Tur y el diputado Toni Costa fue uno de los intérpretes de las caramelles.
La celebración registró una gran asistencia en un día prácticamente primaveral con más de 22 grados de temperatura.