El Consell de Formentera ha presentado hoy las medidas de ahorro de agua que aplicará durante julio y agosto y ha pedido a los particulares que no llenen piscinas ni laven vehículos ante la disminución de las reservas del líquido en la islas, cuyos depósitos se encuentran al 50 % de su capacidad.
La institución insular informa de que las medidas se empezarán a aplicar a partir del próximo lunes 20 de julio hasta finales de agosto, ha detallado consellera insular de Medio ambiente, Daisee Aguilera.
El Consell de Formentera ha explicado que la avería que se produjo el 11 de junio en la desalinizadora hizo que durante unos días la cantidad de agua depurada producida fuera inferior a la demanda de la atendida.
Esto ha provocado, según Aguilera, «una disminución de las reservas de agua acumuladas en los depósitos de agua de la isla».
Teniendo en cuenta este hecho, el Consell de Formentera «para evitar que no se agoten las reservas de agua actuales, y conocedor de que durante la segunda quincena de julio y el agosto el consumo solo ser superior a la producción de la desalinizadora» llevará a cabo medidas de aplicación interna en la propia institución.
Entre las medidas, Formentera reducirá al mínimo los riegos de los jardines públicos, reservará las técnicas de uso intensivo de agua para limpiar las calles sólo en casos excepcionales y de motivada necesidades, suspenderá la actividad de riego de caminos y aparcamientos, y suspenderá la actividad de lavado de vehículos del Consejo de Formentera.
Además, se establecen recomendaciones para los particulares, como reducir al mínimo los riegos de los jardines, no realizar actividades recreativas que impliquen el uso de agua desalinizada como llenar piscinas, evitar la limpieza de vehículos y hacer un uso responsable del agua y reducir al máximo su consumo.
El director de la delegación de Aqualia en Baleares, Eduardo de Castillo, y la delegada de Aqualia en Formentera, Maria del Mar Yern, han apoyado a esta decisión para evitar futuros problemas en el abastecimiento de agua.
De Castillo ha destacado que los depósitos de la isla están al 50 por ciento de su capacidad, «una reserva que garantiza el suministro», ha añadido, pero ha recomendado a la ciudadanía que haga un uso responsable en el consumo del agua.