El pasado fin de semana PERIÓDICO de IBIZA Y FORMENTERA habló con Leo Stöber, propietario de la empresa Sunway SL y del hotel club Punta Prima, sobre el litigio que mantiene contra los miembros de Gent per Formentera Jaume Ferrer, Bartomeu Escandell, Sílvia Tur, Josep Mayans y Sònia Cardona por la paralización del permiso de urbanización de la segunda fase de su complejo hotelero.
—¿Qué pasa con este terreno?
—Hace ya muchos años, implantamos sobre esta zona rocosa y pedregosa una instalación que el gobierno central declaró de interés público y ejemplar porque nosotros conseguimos, en una isla como Formentera, crear unos jardines que no se ven en otros sitios de la isla. Tenemos la capacidad de mantenerlos verdes gracias a que reciclamos el 100% de nuestras aguas sanitarias. Esto conlleva un enorme coste, pero es de un ecologismo muy pocas veces visto, no solo en Formentera sino en Balears. Pensemos que el Consell Insular, al final de una inicial limpieza, desemboca todas las aguas negras de la isla al mar, salvo las del hotel club Punta Prima, que las reciclamos a un coste muy alto.
—Pero no todo el terreno está igual de ajardinado ni urbanizado.
—Así es. Nuestro disgusto fue muy grande cuando, a pesar de que una sentencia del Tribunal Supremo declaró estos suelos urbanos con los derechos inherentes a este tipo de terrenos, el gobierno del Consell, cuando llegó en 2007 al poder, y por motivos que todavía hoy ignoramos, no estuvo de acuerdo con lo que aquí hacíamos y paralizó todos los trámites que para entonces habíamos llegado a concluir para, años después, declarar públicos y de cesión gratuita la mayor parte de los suelos vacantes no construidos.
—¿De cuánto terreno estaríamos hablando?
—Aproximadamente de unas cinco hectáreas. Algunas de ellas con jardines que nos han costado mucho construir y mantener y que, a día de hoy, son espacio público que ya no es nuestro. Con el agravante de que, según la normativa del 2010, tenemos que cederlo gratuitamente al Consell. En estos terrenos que han declarado públicos y de cesión gratuita, han incluido dos viviendas. Estas dos casas nos ha dicho el Consell que no nos las devuelve si no tramitamos un nuevo planeamiento en lugar del que ya han paralizado y anulado. Si nosotros tramitamos este nuevo planeamiento, tenemos que aceptar la incautación, no tengo otra palabra, de todos estos terrenos nuestros y, si no estamos de acuerdo, entonces no se puede tramitar, y si no se tramita, tampoco se nos devuelven las dos propiedades que se han declarado públicas y también de cesión gratuita.
—Una especie de pez que se muerda la cola. ¿Cómo actuar ante esta situación?
—A partir de este momento, nosotros nos vimos obligados a interponer la querella criminal contra los responsables de todo este, con perdón, desaguisado. Esta es la causa de todo el procedimiento que se está arrastrando desde hace años a nivel penal.
—Causa criminal contra el gobierno de Gent per Formentera.
—No es contra el gobierno de Gent per Formentera, es contra determinados integrantes de este gobierno. Nosotros no interpusimos una querella criminal contra el partido ni contra sus integrantes, sino contra los responsables directos que declararon estos terrenos públicos cuando una sentencia previa del Tribunal Supremo los había declarado urbanos con todos los derechos que esto comporta.
La interpusimos, además, porque estas personas nos presionaban para que aceptáramos, a través de un nuevo planeamiento, la situación de perder casi todos nuestros terrenos para recuperar dos casas y, asimismo, desde hace diez años no nos dejan hacer las reformas necesarias y lógicas que necesita hacer una instalación pública como es una instalación hotelera. Nos lo impiden diciendo también que no las podemos hacer hasta que no tramitemos un nuevo planeamiento. Por lo tanto, nos sentimos coaccionados y expropiados. No tengo calificación.
—No se querellaron contra los integrantes del gobierno del Consell que eran del PSOE, ¿por qué?
—En un primer momento, creo recordar que había en el equipo de gobierno dos miembros del PSOE y el resto eran de GxF, pero no es un problema de ideología o de partidos, es un problema de personas. Cuando tú te querellas, tienes que señalar contra quién te querellas, con sus nombres y apellidos. Nosotros tenemos absolutamente claro quiénes son responsables y quiénes no, cosa que además ya hemos explicado ante el Juzgado de Instrucción número 4 de Ibiza.
—¿Por qué un ‘primera espada' como Pedro Horrach para encargarse de este recurso?
—Mire, yo no deseo hablar en público de personas concretas que intervienen o dejan de intervenir en este proceso.
—¿No se siente cansado de luchar para conseguir que le den la razón?
—Yo no tengo ninguna antipatía hacia las personas contra las que hemos interpuesto la querella. No tengo personalmente nada contra ellos, pero creo que es lógico que cualquier propietario, grande o pequeño, al que le quiten sus jardines, le quiten casas y le digan que esto lo tiene que ceder sin indemnización, no se cansará hasta el fin de sus días de decir que esto es un atropello. Yo no me voy a cansar hasta el final de mi vida, si Dios me da vida. Y si Dios no me da vida, mis descendientes van a defenderlo en memoria mía.