Estampa curiosa la de ayer en la plaza de la Consitución de Sant Francesc. 12 de noviembre, 10.00 horas y hasta cuatro operarios del Consell apresurándose en tener listo el árbol de Navidad.
Pese a estar aún en la primera mitad del mes de noviembre, desde ayer Formentera ya cuenta con el elemento más definitorio de cualquier localización del mundo en las fechas más señaladas del año.
No fue de extrañar, pues, que tanto visitantes como vecinos mostraran cierto desconcierto ante tal estampa. Si bien, cada vez más, nos estamos acostumbrando a que supermercados y grandes superficies nos presenten la Navidad de forma tan anticipada, el abeto prematuro de Sant Francesc no dejó a nadie indiferente.
«Aunque no sea normal, a mí me lo parece», señalaba una joven haciendo referencia al cambio de costumbres en la sociedad. Según ella, decisiones como estas pueden favorecer al comercio, puesto que «la gente empieza a hablar de la Navidad y todo fluye mejor».
Una vecina del municipio, por su parte, se mostraba más sorprendida ante las tareas de los trabajadores: «Acabo de llegar, en noviembre, y me encuentro el montaje del árbol… me sorprende que lo hagan tan temprano». «En la fecha en la que estamos es muy temprano», coincidía otro transeúnte, mientras apelaba a las costumbres: «Tradicionalmente el árbol se monta el 8 de diciembre».
Y cómo no, hay quien se tomó el asunto de forma más drástica. «Nos estamos adelantando al tiempo, no estamos dando la oportunidad a que suceda nada antes de Navidad; directos a Navidad y ya está», expresaba, entre risas, una residente de la isla.
Pese a que los motivos reales de esta acción se deben más a razones técnicas y de planificación que a cualquier otro asunto, lo cierto es que el abeto, a 12 de noviembre llama la atención y nos avisa, amantes o no de la Navidad, que tarde o temprano, se nos viene encima.