Gent per Formentera ha reclamado este lunes en un comunicado el cierre perimetral de Baleares ante la preocupación de la movidad que genera las vacaciones de Semana Santa y la incipiente cuarta ola en muchos países vecinos. En estos momentos en Formentera "nos encontramos en una situación muy favorable en cuanto a la incidencia de la Covid-19 después de largas semanas con unos datos sanitarias muy preocupantes y con restricciones muy severas para toda la población y para el tejido empresarial".
Explican que si bien son conscientes de que "todavía no nos podemos relajar entendemos que por criterios sanitarios de prevención se decida seguir aplicando medidas restrictivas".
Además, "nuestra economía depende principalmente del turismo y cualquier decisión que ponga en riesgo los avances hechos puede tener efectos muy negativos en la economía local de nuestra isla".
Recuerdan que desde el principio "hemos defendido la necesidad de hacer una desescalada lenta, que debe ir en consonancia con el ritmo de vacunación para lograr la inmunización grupal suficiente para no poner en peligro nuestra salud, ni nuestras libertades, para evitar una cuarta ola y evitar poner en riesgo el inicio de una nueva temporada muy importante para la economía de nuestra isla".
"No nos cansaremos de repetir que no podemos bajar la guardia y que debemos mantener todas y cada una de las medidas de prevención y que es indispensable la responsabilidad individual de todos" señalan en el comunciado.
Por todo ello, desde GxF "vemos con preocupación el aumento de movilidad que implicarán las vacaciones de Pascua".
Defienden que es llamativo "que las Islas Baleares sea la única comunidad sin cierre perimetral, aunque incluso Canarias finalmente decidiera rectificar la decisión de permanecer completamente abierta, y que desde el Estado y la Unión Europea no se restrinja la movilidad internacional, son condiciones que harán aumentar los viajes no esenciales y, por tanto, el riesgo de contagio para nuestra población".
Además, "nos encontraremos ante la paradoja de medidas muy restrictivas para los residentes, con la limitación de encuentros sociales y de viajes para ver familiares a otras comunidades , restricciones que entendemos que ahora mismo son necesarias, y, por otro lado, asistiremos a la llegada de viajeros extranjeros que desconocerán estas medidas con la complicación de hacer que las cumplan y comprobar que así siguen".
Tras más de un año de pandemia, "las decisiones, que no son fáciles de tomar, deben evitar no hacer ningún paso más en falso ya que tenemos la experiencia del puente de la Constitución y de las fiestas de Navidad y de las consecuencias que han conllevado el aumento de la movilidad y la relajación de las medidas sociales".
Desde GxF critican la política del gobierno del Estado y de ciertos países de la Unión Europea que, "si bien recomiendan prescindir de cualquier viaje al extranjero que no sea realmente necesario, no lo evitan y no establecen medidas a nivel europeo que limiten los desplazamientos a los estrictamente esenciales durante la Semana Santa".
También reclaman a la presidenta del Govern de las Islas Baleares que rectifique su decisión de no aplicar el cierre perimetral de las Islas Baleares "para dar un mensaje claro de restricción y que se hagan las presiones y gestiones necesarias para garantizar que la campaña de vacunación haga pasos en firme para garantizar una nueva temporada imprescindible para la economía de nuestra isla".