El Consell de Formentera deberá revisar la licencia otorgada para la construcción de una mansión de 400 metros cuadrados en Punta Gavina a la empresa Morsanix S.L, propiedad del dueño de la constructora Ferrovial, Rafael del Pino. Así se desprende de la resolución del recurso de apelación presentado por la citada empresa ante el Tribunal Superior de Justicia de Baleares (TSJB) contra la decisión del Juzgado de lo Contencioso Administrativo número 3 de Palma por la que anulaba el acuerdo del Consell de 31 de julio de 2014 que declaró la «inadmisibilidad de oficio» de esta licencia.
Zona ANEI
El Consell de Formentera otorgó en 2012 los permisos para la construcción de dos mansiones en una zona calificada como Área Natural de Especial Interés (ANEI) de Punta Gavina a los dueños de Ferrovial y de Mango. Estas licencias se pudieron otorgar merced a la disposición transitoria que la institución insular añadió a su planeamiento urbanístico, ya que la normativa impedía la construcción en este tipo de suelo protegido si no concurría la circunstancia de herencia.
La concesión de estas licencias fue recurrida por el empresario alemán Leo Stöber al considerar que hubo defectos en su tramitación al no disponer del preceptivo informe jurídico, que no se respetó el plazo de exposición pública y que, cuando se expusieron, estaba vigente el Decreto Ley 1/2007 que suspendía el otorgamiento de licencias de edificación.
La máxima institución de Formentera se vio obligada a incoar un expediente de revisión de licencia en enero de 2018 para cumplir una sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Baleares derivada de la demanda presentada por Stöber contra la licencia otorgada al dueño de Mango.
Una vez abierto el expediente, una de las medidas fue solicitar el informe preceptivo del Consell Consultiu, que concluyó que la licencia «no sufre ninguna de las causas de nulidad radical o de pleno derecho» que había esgrimido el empresario alemán.
No habrá revisión
En diciembre de ese mismo año el Consell aprobó en sesión plenaria que no procedía la revisión de oficio de la licencia. Ahora se repite la historia con la licencia de la otra mansión, la del propietario de Ferrovial, y todo apunta a que el Ejecutivo insular actuará del mismo modo. De hecho, fuentes consultadas por el Periódico de Ibiza y Formentera apuntan a que este asunto podría entrar en el pleno que se celebra el viernes y que se rechazará, al igual que se hizo con la otra licencia, la revisión de oficio en base al informe del Consell Consultiu.
De cualquier forma, y también al igual que sucedió con la licencia de la mansión del propietario de Mango, el empresario Leo Stöber volverá a impugnar judicialmente la decisión del Consell.