El conseller de Economía del Consell de Formentera, Bartomeu Escandell, declinó este viernes contestar en el Pleno a una pregunta realizada por la oposición de Sa Unió en la que le solicitaban información sobre las contrataciones realizadas por la institución en el año 2016 a dos empresas que fueron condenadas por formar cártel para quedarse con licitaciones de contratos menores de instituciones de todo el Estado.
Concretamente, desde Sa Unió hacían referencia a una investigación realizada por la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) de la que se desprendía que una persona de dentro de la institución, un funcionario o un político, facilitaba la consecución de estos contratos a dos empresas en concreto: Hidria y Regio plus Consulting, esta última vinculada al denominado ‘gurú' de Mes, Jaume Garau.
El portavoz de la oposición, Llorenç Córdoba, inquirió sobre qué tenía previsto hacer la institución al respecto de estas informaciones que vinculaban a alguien de dentro del Consell con el cártel, si había alguna posibilidad de obtener una copia de estos correos electrónicos que se enviaban entre el Consell y Garau y si el propio Escandell era conocedor de que se estaban realizando esas prácticas.
El conseller, en lugar de contestar a las preguntas realizadas desde la bancada de la oposición, optó por calificar de «poco elegante» a Córdoba por realizar estas preguntas en una sesión plenaria. «Las cosas se pueden decir de muchas maneras o se pueden preguntar de muchas maneras, pero el saber estar y la elegancia tienen que estar por encima de todo», aseguró el conseller de Economía de Formentera.
Lo único que mencionó con respecto a lo preguntado es que en los años 2017 y 2018 «ya se trataron estos temas, además de manera penal, y quedaron absueltos todos». Sin embargo, no hubo ninguna referencia a los correos electrónicos cruzados entre la institución y Garau en los que, según la investigación de la CNMC, el 22 de junio de 2016 «un empleado del órgano de contratación [el Consell de Formentera]» le envió un correo electrónico a uno de los propietarios de la empresa Regio Plus, Jaume Garau, donde le indica que le falta el presupuesto de Hidria (otra de las empresas que participaron en la licitación y la que finalmente resultó la adjudicataria del contrato) y le pide que se lo envíe.
Sorprende de esta situación que un empleado o político de la institución contratante (la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia no desvela su nombre ni ningún dato sobre esta persona) solicite a una empresa que opta a un contrato que le remita el presupuesto de otra empresa que lucha por ese mismo contrato.