La indignación es el sentimiento compartido entre los habitantes del Pilar de la Mola, en Formentera. Este jueves, poco después de las 13.00 horas, quedaron sin servicio de telefonía móvil e internet los usuarios de las compañías Vodafone, Movistar y Orange. La afección no era solo en el núcleo urbano sino que también llegó a las casas diseminadas en las vendas de Sa Miranda y Cala Saona, lo que supone más de 1.000 habitantes sin comunicación.
En las primeras horas, los servicios de atención telefónica de las tres compañías no daban ninguna explicación y todo hacía pensar que sería un corte temporal, pero según pasaban las horas, las operadoras empezaron a explicar que se trataba de una antena que había dejado de dar servicio y que «estaban trabajando en ello».
Llegó la noche, la madrugada y Netflix, Facebook y Whatsapp no daban señales de vida. Este viernes por la mañana, la vida volvió a las calles y entre las familias que acompañaban a los alumnos del CEIP de la Mola no se hablaba de otra cosa: «Es una vergüenza», se comentaba esta mañana a la entrada del colegio.
El pasado mes de noviembre ocurrió la misma avería un viernes por la tarde y el servicio no se restableció hasta el lunes por la mañana. Sorprende que las tres compañías tengan tan poca capacidad de reacción ante un problema que se viene repitiendo y que genera muchos inconvenientes a los usuarios ya de por sí aislados de la Mola.
Muchos profesionales autónomos que utilizan internet para su actividad profesional desplazaron ayer su «despacho» a bares y cafeterías de Sant Ferran y Sant Francesc y otros muchos cogieron el coche hasta es Caló para hacer unas llamadas. A la vista de la respuesta dada por el momento por las tres compañías, todo parece indicar que la Mola seguirá incomunicada hasta el lunes.