El presidente del Consell Insular de Formentera, Llorenç Córdoba, ha aportado en la Conferència de Presidents celebrada este lunes en Mallorca, la experiencia de la menor de las Pitiusas en la regulación de entrada de vehículos en el territorio insular, al tratarse de una problemática que ya están empezando a sufrir en otras islas y sobre la que Formentera lleva ya años actuando.
Córdoba ha reconocido que esta regulación en la entrada de vehículos tiene que ir acompañada de un buen transporte público, algo con lo que no contaba la isla de Formentera. «Nos encontramos que no había un contrato en vigor, que estaba caducado. Estamos trabajando en realizar esta nueva licitación y lo que hemos hecho, mientras tanto, es aumentar las frecuencias en invierno, algo que nos han agradecido los residentes», ha indicado el presidente del Consell Insular de Formentera.
En cuanto a la problemática de la sequía, más acuciante en Formentera que en el resto de las islas, Llorenç Córdoba ha reconocido que no habrá problemas de abastecimiento a la población gracias a la desaladora, aunque «a la hora de regar, del sector primario, sí que tenemos un problema muy grave» porque pese a haber una balsa de riego que costó mucho dinero y que lleva muchos años construida «no es hasta ahora, gracias a la colaboración del Govern balear, cuando la podremos abrir y podremos usar esta agua depurada en el campo de Formentera, lo que será un avance muy importante».
Otra carencia que ha destacado el presidente formenterer es la ausencia «prácticamente total» de los servicios del Estado en la isla. En cuanto a las Fuerzas de Seguridad, ha reconocido que el principal hándicap es conseguir alojamiento para los guardias civiles tanto en los meses de invierno como en los de verano.