La Asociación Profesional Justicia Guardia Civil (JUCIL) consideró ayer que hay «un antes y un después» tras el episodio vivido por varios agentes en aguas de Formentera cuando un taxi patera les embistió para intentar huir e incluso les rociaron con gasolina. Desde Jucil, Tomás Quesada reiteró ayer que, tras una reacción tan violenta como la sufrida por estos efectivos, es evidente que las cosas han cambiado debido al afán de los patrones por preservar las embarcaciones, «un medio para ganar dinero».
«Han cambiado la metodología y ya no hablamos de la típica patera con poco valor que abandonan una vez se llega. En este caso, son embarcaciones que van y vienen y si pierden la nave, pierden el taxi, un método con el que ganan dinero», recordó.
Quesada explicó que van a esperar para comprobar cómo evoluciona la situación de la inmigración ilegal en las islas. «Confiamos en que no se vuelva a repetir una situación tan agresiva hacia nosotros», reiteró.
También lamentó que, al final, el origen del problema es el mismo de siempre en Baleares: la falta de efectivos y de medios.
De hecho, recordó que la plantilla de la Guardia Civil en Formentera está dimensionada a las necesidades de hace años, pero no a la situación actual, contando sólo con una unidad «que ya se ha quedado corta teniendo en cuenta el aumento de población y de turismo».
En Jucil manifestaron que, aunque se cambiara la dotación en la isla, al final iban a tener numerosas vacantes al rechazar los agentes un destino como las Pitiusas por la problemática de la vivienda y el elevado coste de la vida. «De nada sirve aumentar el catálogo, si eso sólo sirve para tener 20 vacantes descubiertas. Se necesitan incentivos para que la gente pueda venir y pasa cada vez en más unidades, que nos encontramos con vacantes no cubiertas y con agentes que no somos capaces de retener», lamentó.
Quesada reiteró que en Baleares los problemas no paran de crecer y las plantillas, en el mejor de los casos, están estabilizadas, cuando no van menguando.
En relación al suceso, hay que recordar que, según las últimas informaciones, hay un patrón detenido y se estaba pendiente de confirmar si otra persona resultaba también detenida por patronear una de las naves.