La Asociación de Comerciantes de Sant Antoni lamentó ayer el escaso interés del Ayuntamiento en resolver la competencia desleal por parte de los vendedores ambulantes y los «falsos» artesanos del mercadillo del Passeig des Fonts.
El colectivo que agrupa a los comerciantes del municipio de Sant Antoni se constituyó en diciembre de 1998. Sus propuestas se recogieron en diez puntos cuya finalidad era mejorar la imagen turística. No obstante, este sector ya con anterioridad había demandado al Ayuntamiento que adoptara medidas para evitar el intrusismo.
Los comerciantes han decidido adoptar medidas y no descartan las de tipo legal sino se resuelve la situación que atraviesan y que se remonta a 1989, año en el que ya expusieron sus quejas al alcalde. El día 6 mantuvieron una reunión con el concejal de Gobernación del Ayuntamiento de Sant Antoni, Josep Juan Ferrer, donde les dijeron «que se habían dado las licencias del mercadillo del Passeig des Fonts y no podían decidir quitar los permisos».
Esta respuesta ha ocasionado «la indignación de los comerciantes» ya que aseguran que el equipo de gobierno no respeta las ordenanzas municipales sobre la venta de artesanos al usurpar la identidad de los artesanos auténticos, porque los productos que tienen a la venta son los mismos que se venden en los comercios. «Se comete una ilegalidad flagrante», denuncian.
La asociación demanda que se cumpla de forma estricta la normativa vigente «y no se deteriore más la imagen turística del municipio de Sant Antoni».