«La falta de recursos humanos y económicos ha condicionado el funcionamiento del centro de menores. Es indispensable contar con una financiación que cubra las necesidades reales y que permita una estabilidad para hacer una planificación a largo plazo». De este modo se recoge la situación del centro de menores «Bisbe Huix», gestionado por la entidad mediante un convenio con el Consell Insular, en la memoria de actividades de Cáritas Diocesana de Eivissa i Formentera.
La institución vinculada a la Iglesia rubricó con el Consell Insular una prórroga del convenio sólo por seis meses, cuyo plazo acaba en junio. El Consell aportó la cantidad de 15 millones de pesetas al centro de menores durante 1998, de los que 12.280.237 pesetas corresponden a gastos de personal. La memoria de esta institución recoge precisamente que «los gastos de personal constituyen la partida más elevada en el total de los gastos del centro». Una situación similar en la que se encuentra la residencia de ancianos «Reina Sofía».
El centro de menores que se encuentra ubicado en la calle Vicente Nicolás de Eivissa realiza una función de acogida residencial de menores de 12 a 18 años en situación de desamparo con problemas afectivos (ausencia de la familia), escolares (retrasos) y compormentales y educativos.
Diez menores residieron en el centro durante 1998, de los que tres permanecieron todo el año. El centro «Bisbe Huix» está abierto las 24 horas todos los días del año.
La memoria de actividades constata también que la calidad de atención de los menores del centro ha sido mejor que en años pasados «debido a la mayor planificación y organización de la labor educativa del equipo». Asimismo, destacan el aumento de las coordinaciones con los colegios, servicios e instituciones al igual que los contactos con las familias de los menores.
El Programa de Acogida al Inmigrante atendió 164
casos
Durante el año 1998 fueron atendidos 164 casos de inmigrantes, de
los que fue necesaria una intervención social a 77 personas y se
les facilitó una ayuda puntual a 63 personas. Atendiendo a la
procedencia de las 77 personas a las que se le abrió un expediente,
33 eran sudamericanos, 20 africanos y 17 europeos.