Los alumnos de la Universidad a Distancia (Uned) en las Pitiüses han demandado una sede propia ante la falta de espacio existente en el edificio polivalente de Cas Serres. Los 414 estudiantes matriculados en este curso sólo tienen espacio para dos aulas, un archivo y la secretaría, que sólo funciona en horario de tarde y que comparten con otras enseñanzas, como Escuela de Turismo o el Conservatorio, ubicadas en el inmueble.
El delegado de alumnos de la Uned, Francisco Javier Cabo, señaló ayer que una de las posibilidades que barajan es pedir a la Universitat de les Illes Balears que comparta su sede en la Extensión o que «las instituciones públicas cedan un local», apuntó el representante de los alumnos. Cabo, que estudia Psicología, lamentó la inferioridad de condiciones en la que se encuentra la Extensión de la Uned en Eivissa frente a Menorca, «que tiene un local, cedido por el Ayuntamiento, que se va a empezar a reformar». El presupuesto de la Uned para Eivissa es de unos doce millones de pesetas para este curso académico 1998-1999.
La enseñanza universitaria a distancia ha potenciado las videoconferencias durante este curso, pero los alumnos se han encontrado con ciertas dificultades al no poder compaginarlas con las clases presenciales por la falta de aulas. Durante este curso también se ha hecho uso de modernas tecnologías, como el correo electrónico para contactar con los tutores que se encuentran en Madrid.