La Coalició d'Organitzacions Progressistes de Formentera (COP) ha impugnado ante la Junta Electoral el caso de los 74 nuevos electores que desde dos localidades argentinas se han inscrito en el censo de Formentera para poder votar en esta isla. Enric Barot, portavoz de los progresistas, explicó ayer que «todo ciudadano español que resida en el extranjero tiene derecho a votar, pero para decidir la circunscripción tiene que demostrar un vínculo, y ninguna de estas 74 personas tienen vinculación con Formentera». Barot aseguró también que la COP «presentará una denuncia por delito electoral».
Entre estos 74 inscritos figuran apellidos como Fornés, Quetglas, Gomila, Tugores, Fernández o Pérez, linajes de origen mallorquín, menorquín y peninsular.
La izquierda teme que «los reiterados viajes institucionales del miembros del Partido Popular a Argentina pueden haber determinado esta inscripción en el censo de Formentera».
Por su parte, el Govern balear aseguró ayer, en un comunicado, que no tenía «ninguna relación con la realización del censo electoral de Formentera». El Ejecutivo también afirma que «el censo de Formentera ha crecido en esta convocatoria electoral al mismo ritmo que el del resto de la autonomía o de España».