No hace ni una semana cuando nació un bebé en el hospital Can Misses producto de una fecundación in vitro. Las alternativas a la fertilización por medios naturales no son solo patrimonio de las clínicas privadas de Barcelona o Valencia. Desde la Seguridad Social se ofrece la posibilidad de utilizar estas técnicas de reproducción, siempre y cuando la pareja cumpla los requisitos.
El ginecólogo Alberto Comes, del hospital Can Misses, es especialista en técnicas de reproducción asistida. Atiende a las parejas que acuden al hospital con problemas para tener hijos. Sus propios compañeros les remiten los casos. Can Misses realiza el estudio para comprobar si la pareja es fértil. Aquí se limita la actuación del hospital. Una vez comprobado que la pareja es estéril, se envía a la Unidad de Infertilidad en el hospital Cruz Roja de Palma.
El doctor Comes planteó hace ya un año a la dirección de Can Misses la posibilidad de realizar los tratamientos de inseminación artificial que se hacen en Palma en Eivissa, pero hay una serie de problemas de tipo administrativo que impiden la utilización de estas técnicas ya que Can Misses es un hospital comarcal con una cartera de servicios limitada.
Sin embargo, a juicio del doctor Comes, el hecho de ser Eivissa una isla facilita que el hospital dé unos servicios que no le son los propios. «Aquí se dispone de una unidad de cuidados intensivos que no hay en un hospital comarcal», precisó. La demanda de este tipo de tratamientos es tremendamente importante, ya que se calcula que hay un 15 por ciento de población con problemas de infertilidad, «probablemente el porcentaje sea más alto, porque hay gente que no consulta», indica el especialista.