La imagen turística que se tiene de Eivissa y Formentera y la que se quiere en un futuro fueron las cuestiones que centraron ayer el coloquio realizado con motivo de la exposición «Sempre Eivissa i Formentera», organizado por Sa Nostra en la Extensión. Los integrantes del coloquio, moderado por Isidor Marí, coincidieron en la necesidad de mejorar la imagen turística que se tiene partiendo de una intervención y aludieron el significado que supone la declaración de Eivissa como Patrimonio de la Humanidad.
El concejal de Turismo del Ayuntamiento de Eivissa, Maurici Cuesta, opinó que la imagen que se tiene es muy mejorable y defendió una propuesta más diversificada y arraigada, sin olvidar que se necesita «una modernización de la oferta tanto en el ámbito privado como público».
La consellera de Cultura, Fanny Tur, compartió los argumentos de Cuesta y abogó por el carácter diferenciador de las Pitiüses. Tur recordó que «el modelo actual está agotado, no hay que dramatizar ni buscar culpables sino buscar soluciones».
Ernesto Ramón Fajarnés, de Fomento del Turismo, lamentó «la
imagen mala» de Eivissa en alusión a la magnificencia que se le da
a los «hooligans»
Marià Marí, del GEN, consideró necesario la puesta establecer unas
medidas de ordenación del territorio.