No hubo demasiada suerte. Los 400 millones de pesetas consignados en las administraciones de las Pitiüses se quedarán en unos 100 millones gracias a las terminaciones de los premios gordos, según las primeras estimaciones de los vendedores. Queda ahora esperar a las listas oficiales de la ONLAE para ver si las pedreas son más favorecedoras.
Sin embargo, la suerte llegó a la isla casi por casualidad desde Madrid gracias a una trabajadora de la Policlínica del Rosario, quien repartió entre sus compañeros de trabajo varios boletos agraciados con el segundo premio comprados en la capital. Quienes también se llevaron un buen pellizco fueron los socios, deportistas y «amigos» de la Unió Esportiva Sant Josep gracias a unos boletos comprados en una administración de Sant Antoni: 12.600.000 pesetas, que se recibieron con alegría en esta asociación.
Algunos establecimientos llegaron a vender boletos premiados con
hasta 18 millones de pesetas, caso de la administración número 1 de
Santa Eulària.
Un año más, los lectores de Ultima Hora Ibiza y
Formentera fueron los primeros de las Pitiüses en conocer su suerte
gracias a nuestra segunda edición, que a primera hora de la tarde
llegó a los kioscos. Desgraciadamente, este año no dio para muchas
alegrías.