El alcalde del ayuntamiento de Eivissa, Xico Tarrés, afirmó que, tras el primer año de funcionamiento de su equipo de gobierno, «Eivissa es una ciudad más humana».
El primer edil subrayó que su labor está caminando hacia la transformación del municipio en «un lugar en el que se pueda vivir mejor». En esta línea, comentó que mediante la implantación de las zonas azules, el Vila-Bus y los aparcamientos disuasorios han reducido «la locura de coches» que circulaban por las calles de Eivissa, medida que contribuye a que los viandantes «puedan pasear más por la ciudad y disfrutar mejor de ella». Asimismo, Tarrés hizo hincapié en la voluntad del Pacte de convertir el Consistorio en una institución más ágil y más cercana al ciudadano. «Mediante proyectos como el Consell Municipal de Participació Ciutadana hemos conseguido que todas las asociaciones tengan voz dentro de este Ayuntamiento», aclaró Tarrés.
El alcalde de Eivissa quiso aclarar que, a pesar de que el balance de su primer año es «tremendamente positivo», todavía les quedan algunas asignaturas pendientes. En este sentido, por lo que respecta al incesante ritmo de construcción que se detecta en el municipio, Tarrés remarcó que no van a detenerlo, sino a regularlo. «Aunque las paredes de Eivissa están más limpias, no nos temblará el pulso a la hora de sancionar a las discotecas que incumplan la normativa referente al pegado de carteles», subrayó el alcalde de Eivissa. En esta línea, solicitó la colaboración de los ciudadanos para mantener el municipio más limpio, aunque aclaró que el Consistorio seguirá invirtiendo «tiempo y esfuerzo en esta materia, en la que ya se han logrado mejoras».