Los fumadores ya no tendrán excusa para no cuidar las playas de Eivissa. El Ayuntamiento ha invertido un millón de pesetas en la realización de 10.000 ceniceros de playa (con una base que permite clavarlos en la arena para mayor comodidad) que serán repartidos a través de los hoteles con el objetivo de evitar las poco higiénicas y antiestéticas colillas.
Estos ceniceros, que son «ecológicos y biodegradables», fueron presentados ayer en la playa de Figueretes por la concejala de Ciudad Sostenible, Marta Roldán, y el presidente de la Asociación Hotelera de Eivissa, Pedro Matutes. Roldán comentó que, cuando se limpian las playas, «se encuentran miles de colillas», algo que se pretende evitar. Además, consideró que la medida puede ayer a concienciar al turista y al residente de la necesidad de mantener limpias las costas en todos los sentidos.
Por su parte, Matutes comentó que los hoteleros están muy satisfechos con el diálogo y la colaboración que se ha establecido entre empresarios y Ayuntamiento, ya que, como indicó, las playas son el principal atractivo para los visitantes.