Maquetas de embarcaciones que recorren los tres últimos siglos de la vida marítima de Eivissa. Este es el motivo de la muestra inaugurada ayer en el Club Naútico, con el que la institución continúa celebrando su 75 aniversario.
La historia de una isla está marcada por las embarcaciones que navegan en sus aguas. La de Eivissa ha contado con buques de guerra, barcos mercantes y los actuales de recreo. Veintiuna maquetas rememoran una evolución inmortalizada con pequeñas tablillas, que han servido para dar forma a la representación de los momentos más señalados de la naútica ibicenca.
En la exposición destaca un pailebot de tres palos construido en 1950 por el maestro Juan Tur Guardiola. Es la más fiel de las reproducciones que componen la muestra, realizada por uno de los maquetadores tradicionales ibicicencos. Pere Vilàs, investigador y miembro de la directiva del Club Naútico, explica que «este pailebot es la maqueta más grande y más completa, fabricada por uno de los maestros tradicionales con un grupo de alumnos de la Escuela de Artes y Oficios».
Otra de las maquetas que destacan es un jabeque de 1998 pero que representa un apartado bélico de finales del siglo XVII. Es un buque de guerra que los ibicencos emplearon para conocer los mares occidentales y con el que también comerciaron. Abarcaba una tripulación de 160 hombres. El resto de la muestra lo forman embarcaciones de pesca, galeones y goletas. Precisamente el barco más antiguo es una goleta construida en el siglo XIX, aunque, como apunta Pere Vilàs, «se desconoce exactamente el año en el que se fabricó». La embarcación es de dos palos y su perfil es el que presentaban tradicionalmente en aquella centuria las goletas españolas.