Diez de la mañana del lunes 6 de noviembre. La cita es el Centro Social Flassaders. Allí se exponen algunas de las piezas que forman parte de un proyecto que vuelve a Palma con ánimo de convertirse en una cita bianual. Jaume Mir, presidente de honor de la asociación «Per Amor a l'art», encabeza la comitiva que, de manera informal, recorrió las calles de Ciutat para inaugurar la convocatoria del año 2000.
Con la energía que le caracteriza, el presidente Mir camina entusiasmado con esta iniciativa que permite exponer en la calle la obra de numerosos artistas. «'Per Amor a l'art' me parece una idea magnífica porque da a los jóvenes ocasión de mostrar su obra en unos espacios a los que, de otra forma, no tendrían acceso», comenta el escultor, que este año contribuye con su potente versión de la figura de «Joanot Colom», una escultura en bronce de más de dos metros de altura que se exhíbe en la Plaza Mayor donde, al lado, un animal en hierro, obra de Rasta, pone un punto de ironía al dolor que refleja el héroe de las Germanías. Mir alaba esta pieza: «Me gusta como está resuelta», apunta. Por el camino, en plena Rambla, un soporte publicitario recoge una pintura de Francisco Javier Vilches.
Y es que «Per Amor a l'art» ocupa todos los espacios que puede, calles, plazas, vallas, correo postal, todo bajo el lema «los residuos sólidos». En la plaza del Tubo se han instalado unos bloques de construcción para que los más animosos los utilicen como soporte creativo, comentaron los organizadores. La ruta continuó por los Jardines de La Misericòrdia, donde se pueden ver tres esculturas, y siguió hasta el Casal Balaguer. En una de sus salas se exponen fotografías de Amalia Bernabé, en las que se puede ver el poco respeto que los ciudadanos muestran por el mar y los ríos, así como instalaciones.