El conseller de Turisme del Govern de les Illes Balears, Celestí Alomar, habló ayer sin tapujos de la posibilidad de erradicar al sector de turismo inglés que más problemas de imagen causa a la isla de Eivissa y que cifró entre un 20 y un 30 por ciento de la totalidad de los británicos que llegan anualmente a las Pitiüses. «Ese 20 ó 30 por ciento de turismo joven no lo queremos y a los touroperadores especializados que nos lo traen les podemos invitar tranquilamente a que lo lleven a otros destinos, sin ninguno problema. Y lo digo como conseller de Turisme, pero estoy convencido de que coincidirán conmigo el resto de las instituciones», aseguró el máximo responsable del turismo balear. «No nos entrará ninguna tristeza si no vienen», añadió.
Alomar coincide con la idea expresada esta misma semana por Fomento del Turismo sobre la necesidad de reforzar la imagen de Eivissa en Gran Bretaña y, para ello, realizar campañas de gran calado en este país, aunque no confirmó el presupuesto que se destinará a partir del año 2001 a este objetivo. Según el conseller, tal y como le han recomendado los touroperadores británicos, hay que «potenciar los elementos positivos de Eivissa» y no ir tanto «a la defensiva». «El 70 por ciento restante de los turistas jóvenes buscan diversión y tranquilidad, porque venir a Eivissa a divertirse es mucho más tranquilo de lo que pueda ser en otro lugar al no haber problemas de seguridad y existir servicios de calidad. Y hay que potenciar esto. Por eso, lo que tenemos que hacer son campañas activas y decisivas, para que las familias que tienen hijos jóvenes no estén preocupadas por que sus hijos vengan a Eivissa», reflexionó el conseller.
Además, Alomar consideró que hay que apostar no sólo por campañas de promoción e imagen en el exterior, sino también por actuar en el interior de la isla, mediante la ordenación para que los locales estén condiciones» y se den unas determinadas garantías en la oferta.