El hospital Can Misses sólo cerrará un quirófano desde el 1 de julio hasta el 15 de septiembre para evitar un aumento de la lista de espera quirúrgica a partir de otoño.
El gerente de Can Misses, Ignacio Martínez, recordó ayer que mucha gente decide no operarse en verano, «pero está comprobado que se produce un repunte importante en las listas de espera quirúrgica en septiembre». Con esta medida se tratará de contar en verano con «más quirófanos abiertos de los que habitualmente se cuentan para que no se note tanto el impacto durante estos meses y que la lista de espera no sea muy grande en septiembre», precisó el gerente de Can Misses. Cada año se cierran dos quirófanos en el hospital en época estival.
El cierre de una planta en verano coincidirá esta temporada con la planificación que se está realizando de las obras del hospital. El director gerente de Can Misses explicó que se intentará que el número de camas que se reduzcan sean las mínimas, por lo que coincidirá la apertura de la planta de Cirugía, actualmente en obras, con el cierre temporal de la planta de Especialidades Médicas.
Martínez precisó que el cierre de la planta no afecta sólo al hospital Can Misses, sino que «suele hacerse en cualquiera de los hospitales de este país», aunque en este caso coincide con el recinto hospitalario en obras. El cierre temporal de las plantas se realiza debido a que se reduce la presión en los centros sanitarios durante la época estival, aunque en el caso de las Pitiüses esta situación no se produce por el aumento de población en las islas debido al turismo.