El Pacte Progressista no va a tener nada fácil conseguir el apoyo del Partido Popular para que el Consell Insular pueda recibir las competencias de carreteras. Todos los grupos políticos dan por hecho que será imprescindible que la recepción de esta materia vuelva a pasar por pleno para conseguir la mayoría absoluta, pero el PP no está dispuesto a vender sus votos a cualquier precio. El presidente de la formación popular y diputado autonómico, Josep Juan Cardona, y el número uno del PP en el Consell Insular, Antoni Marí Calbet, explicaron ayer que están completamente a favor de que la institución gestione directamente las carreteras, pero no asumiendo unas obligaciones que no le corresponden.
Por ello, Juan Cardona y Marí Calbet afirmaron que su partido volverá a abstenerse en el pleno del Consell si no se modifican el artículo nueve y la disposición adicional segunda, en las que se establece que corresponderá al Consell Insular pagar todas aquellas expropiaciones derivadas de mejoras en las carreteras, incluidas las de las obras que fueron tramitadas mientras era el Govern el titular de las competencias. «Desde que se apruebe el traspaso, el Consell será responsable de todo lo anterior», denunció Marí Calbet, que afirmó que es imposible saber cuánto dinero puede suponer eso a la institución insular, aunque auguró que a buen seguro será mucho. Como ejemplo, el político popular comentó que todavía están sin pagar las expropiaciones que se realizaron en su día para ampliar la carretera de Sant Antoni.
Marí Calbet también explicó que nunca antes una transferencia había incluido esta condición y que todas contemplaban que el Consell Insular sólo tendría que asumir aquellas obligaciones creadas con posterioridad al traspaso de la competencia. «De lo que ha hecho el Govern, que sea responsable el Govern», afirmó Marí Calbet, que aprovechó para reiterar su denuncia sobre el «estado deplorable» de las carreteras pitiusas fruto, en su opinión, de dos años de total inactividad. Aunque el PP no quiere polemizar con Menorca, no encuentra lógico que dicha isla reciba 125 millones más asumiendo 40 kilómetros menos de carreteras y lo atribuyó a la falta de capacidad negociadora del Consell pitiuso.