La junta directiva de la Asociación de talleres mecánicos de Eivissa y Formentera (Aema), que representa a un centenar de establecimientos, expresó durante una reunión esta semana el enorme malestar del sector por el cierre de los dos únicos desguaces de Eivissa (Reciclajes Ibiza y Ca na Negreta) por parte de la Conselleria de Medi Ambient al no cumplir ni los más mínimos requisitos de almacenaje de desechos.
«Indignados» por la medida adoptada por el Govern «sin ofrecer alternativas», los talleres consideran que la situación «es límite» y que rozará «el caos» en breve ya que los talleres «no pueden seguir almacenando más material de desecho», explicó un portavoz de Aema. En los talleres falta espacio y los materiales tóxicos de estos desechos «son una auténtica bomba de relojería». El sector cree que este «no era el momento oportuno para un cierre» y, aunque se muestran conformes a que se hagan cumplir las normativas de respeto al medio, cree que no se debería haber hecho «sin dar un plazo previo a los desguaces para adaptarse a la normativa que se les exige».
Los propietarios de talleres se preguntan ahora dónde van a guardar los aceites, filtros, chatarra y neumáticos que generan. De momento están «aguantado», dicen, pero es cuestión de días llegan al momento crítico. Aema advierte de que el problema no sólo es para su sector sino para otros establecimientos que generan chatarra como tiendas de electrodomésticos o centros de reparación de todo tipo de aparatos y maquinaria.